La Base Naval de Rota forma parte de la identidad de la ciudad desde hace setenta años. Su presencia ha marcado la vida social, económica y cultural del municipio, y la relación entre ambas comunidades, la local y la hispano-norteamericana, atraviesa hoy un momento especialmente significativo. A través de distintas iniciativas institucionales, la base está reforzando su conexión con Rota y mostrando una imagen más accesible, transparente y cercana.

Entre esas iniciativas destaca el proyecto del Centro Multicultural Hispano–Norteamericano, presentado por el Ayuntamiento dentro del programa Rota Futuro para optar a los fondos ITI. Este futuro equipamiento aspira a convertirse en un espacio de encuentro entre ambas comunidades, ampliando la colaboración y favoreciendo el conocimiento mutuo.

A esta voluntad de apertura se suman iniciativas ya consolidadas, como las jornadas de puertas abiertas, que reúnen cada año a cientos de vecinos. En las últimas ediciones, como la del pasado 12 de octubre, cerca de un millar de personas han tenido la oportunidad de recorrer instalaciones habitualmente inaccesibles y conocer de primera mano la actividad cotidiana de la Base Naval.

La relación entre la Base Naval y la ciudad se ha hecho especialmente visible en los últimos años. En 2023 se celebró el 70º aniversario de su llegada a Rota, un hito que este medio documentó extensamente y que permitió repasar no solo su evolución operativa, sino también su papel social y económico en la vida del municipio.

En este marco de apertura, también adquiere importancia la manera en que la base cuida la imagen de sus espacios institucionales. Aunque la prioridad es siempre la operatividad, determinadas áreas, como salas de protocolo, despachos representativos o zonas de recepción, cumplen un papel esencial en la imagen pública de la institución. Son espacios que reciben a autoridades, delegaciones y visitantes, y que conviene atender con la misma seriedad con la que se cuidan otras facetas operativas.

En fechas recientes, una de estas estancias ha sido actualizada con un gesto significativo: la Intendencia ha incorporado una pieza textil confeccionada a medida con el escudo institucional integrado en el diseño, un trabajo elaborado por la firma española Alfombras Hispania, especializada en proyectos a medida para espacios representativos. Se trata de una intervención discreta, pero simbólica, que aporta coherencia visual y refuerza la identidad del espacio sin alterar su carácter.

Estas actuaciones puntuales encajan en una tendencia más amplia: la de una base que no solo se abre a la ciudad, sino que cuida cómo se presenta. Y ese cuidado cobra aún más sentido en un momento en que la Base Naval se prepara para una ampliación de gran envergadura, ya aprobada y valorada en torno a 300 millones de euros. El proyecto contempla la creación de nuevos muelles, más de 2,1 kilómetros adicionales de atraque, y la ganancia de 29 hectáreas al mar mediante el desvío de la desembocadura del río Salado. Una transformación estructural que reforzará el papel estratégico de la base y multiplicará su capacidad operativa.

En ese contexto de crecimiento, es razonable esperar que también los espacios institucionales sigan evolucionando. La imagen interior y la forma en que se presentan determinadas estancias continuarán teniendo un peso relevante, tanto para la relación con la ciudadanía como para la actividad protocolaria que acompaña a un complejo de esta magnitud.

La Base Naval de Rota, motor económico y social del municipio desde hace siete décadas, avanza así en su camino hacia una convivencia más cercana con la ciudad. Una apertura que se refleja tanto en sus iniciativas públicas como en los detalles que configuran la imagen de sus espacios. Detalles que, paso a paso, contribuyen a reforzar la relación entre la base y la comunidad que la rodea.