Los bares deberán cumplir estrictamente el horario de cierre, la emisión de ruidos y eliminar TV y altavoces del exterior

La comunidad de propietarios del Edificio Jerez, situado en pleno corazón de la  Costilla, ha manifestado su satisfacción a través del despacho Talentia Abogados,  por  haber conseguido, según informan, que el Ayuntamiento de Rota haya tomado medidas legales con el fin de evitar las actividades que a los vecinos molestan y que provienen de los bares que hay situados en los bajos de este bloque de pisos.

Es una pequeña victoria que consideran tras haber denunciado pública y legalmente que el Consistorio roteño hiciera caso omiso a sus reivindicaciones de que los bares de la Costilla, principalmente los que se sitúan en los locales más cercanos al edificio, cumplieran con la normativa vigente en lo que se refiere a los niveles de  emisión de ruidos, aforo, horario de cierre u ocupación de la zona que como comunidad tienen compartida.

Los vecinos se quejaban de que pese a sus reiteradas peticiones al Ayuntamiento para que acutara e hiciera cumplir estrictamente la normativa, este, a su juicio, no tomaba las medidas necesarias motivo por el cual, interpusieron una reclamación por inactividad administrativa a la Administración local. A raíz de esa reclamación por parte de los propietarios del Edificio Jerez, desde el gobierno local se ha enviado un comunicado a los bares, con fecha del 26 de febrero, para que estos estén alertados y ejerzan estrictamente la actividad que le ampara su licencia sin extralimitarse de la  misma. Los bares que han sido informados son en total seis, cuatro de ellos situados en los locales comerciales del edificio y dos algo más alejados, uno en avenida de Sevilla en su confluencia con San Fernando y otro en esta misma avenida San Fernando algunos metros más retirados del bloque. De la misma manera, en el comunicado que se envía a los dueños de los bares, se les indica que deberán dar "exhaustivo cumplimiento" a las medidas indicadas en el Informe del Ingeniero Técnico Industrial incluido en dicha comunicación, y en el que particularmente se señala que deben cumplirse estrictamente el horario de cierre de su establecimiento y la prohibición de instalar altavoces y aparatos de televisión en el exterior del establecimiento.

Teniendo en cuenta las características de los bares a los que se dirigen las quejas, todos, según indica el despacho de abogados que defiende los intereses de los vecinos afectados por los ruidos y molestias que generan la actividad de los locales,  son considerados bares sin música, por lo que según la normativa vigente, deben cerrar a las 3.00 horas los viernes, sábado y víspera de festivos.  Por otro lado, se exige que se cumpla con la norma que regula la expedición de bebidas o comidas para el consumo en terrazas o zonas contiguas al aire libre del establecimiento que en estos casos, no deberá superar las dos de la madrugada. Asímismo se obliga a retirar los aparatos de TV o altavoces que estén instalados en el exterior de los locales y el cumplimiento estricto del aforo de terrazas.

De este modo, los vecinos entienden que se cumplen las obligadas normas de convivencia entre aquellos que quieren descansar en sus domicilios y los que ejercen una actividad empresarial de estas características.

Según ha podido saber Rotaaldia.com por el despacho Talentia Abogados, que el Ayuntamiento haya mandado una comunicación a los bares denunciados con anterioridad es un paso que hasta ahora no habían conseguido y confían en que los bares adopten las medidas que se les exige por norma. En caso contrario, han manifestado, estarán vigilantes para que así sea.

Los vecinos del Edificio Jerez llevan años manifestando su malestar por los ruidos que provienen de los locales situados en los bajos del bloque y en agosto de 2011, incluso denunciaron al Ayuntamiento públicamente por cierta "permisividad" con los bares, algo de lo que este colectivo se quejaba por entender que la adminsitración estaba haciendo dejación de sus funciones ignorando sus denuncias. De hecho, recuerdan que las denuncias y quejas presentadas por este motivo llevaban en el Registro municipal desde el año 2005 y hasta entonces no habían conseguido nada. Insisten en que lo único que quieren las 24 familias que forman esta comunidad de propietarios es poder descansar en sus viviendas.