El temor de que la lluvia pudiera dejar en capilla a Nuestro Padre Jesús de la Paz en su Triunfal Entrada en Jerusalén prácticamente estaba descartado desde primera hora de la mañana en la que Rota amanecía con cielos despejados e incluso con agradables temperaturas que luego se han tornado algo más fría por el viento. Todo hacía presagiar, como así ha sido, que el Domingo de Ramos abriría la Seman Santa roteña con normalidad y los cofrades podrían disfrutar de la primera salida procesional sin incidentes.

Los roteños se han animado, se han echado a la calle y eso ha beneficiado también a la hostelería roteña que casi con la misma intensidad que las hermandades rezan para que el tiempo acompañe y así poder disfrutar de estos días dando un empujón a la economía local.

A las seis de la tarde, puntual, las puertas de la capilla de San Roque se han abierto para dejar paso a la Cruz de Guía que abre el cortejo de la que es la cofradía de los niños. La conocida popularmente como La Borriquita es el semillero de cofrades con el que cuenta la localidad y por ello, la mayor parte del cortejo está formado por jovencísimos penitentes que con la cara descubierta portan las palmas que esta mañana han sido bendecidas en la eucaristía celebrada a las doce y media.

Unos 160 hermanos han desfilado por las calles más céntricas de la localidad y han acompañado a un Jesús de la Paz que este año estrena el suelo del paso que pisa. Y es que en tiempos difíciles económicamente como los que atravesamos, la mayoría de hermandades han decidido gastar menos en exorno floral y destinar ese dinero a sus respectivas bolsas de caridad. Es lo que ha hecho la Hermandad de la Veracruz este año con tres de sus  titulares a los que ha sustituido el monte de flores por otros realizados con materiales muchos más económicos. En el caso de La Borriquita, el tradicional monte de lirios, margaritas blancas, esparragueras, helechos de cuero y  vegetación silvestre se ha transformado en una especie de calzada romana hecha a base de adoquines de fibra adornada por flores silvestres. Muchos de los ciudadanos que han estado a pie de calle no lo han podido visualizar, sólo aquellos que han tenido el privilegio de ver el paso de Jesús de la Paz desde balcones o azoteas habrán percibido este detalle. Entre las novedades, también la vestimenta del Cristo era distinta al año pasado y Jesús lucía el mantolín rojo con el que se bendijo este conjunto escultórico en el año 2007, obra del imaginero roteño Miguel Ángel Caballero Pérez, en vez de la capa anaranjada bordada con la que ha procesionado años anteriores. Tampoco en esta ocasión lucía las potencias que el año pasado estrenaba Jesús.  

Durante todo el itinerario previsto, principalmente por las calles del centro y casco histórico,  el capataz Manuel Jesús Pizones Córdoba, junto a su grupo de capatacía, han guiado el paso de La Borriquita que ha sido seguido por muchos roteños desde su salida gracias al esfuerzo de un total de 45 costaleros que se han ido relevando entre sí. Marcando el paso y tras ellos, la Agrupación Musical Santa Águeda, de Villalba del Alcor (Huelva), ha puesto los acordes musicales para una salida procesional que se ha desarrollado con normalidad y sin incidentes.

A lo largo del cortejo, y eso ya fue una novedad hace dos años, La Borriquita iba escoltada por policías nacionales que se han vuelto a ofrecer a las hermandades para formar parte activa de la salida procesional. Una estación de penitencia que ha abierto la Semana Santa roteña que hoy ha comenzado con la ilusión de los cofrades de poder llevar a cabo un ejercicio práctico de su fe.

En este Año de la Fe, todas las hermandades, incluida la de la Veracruz, a la que pertenece Nuestro Padre Jesús de la Paz y a la que todavía quedan dos salidas procesionales más, viven esta Semana Mayor con intensidad y ganas de renovar sus votos. El fervor a los titulares se demostrará a partir de hoy cada día de la semana que ya ha comenzado para los católicos.