Con el inicio de la huelga de basuras que comenzaba en la noche del pasado domingo 5 de agosto, y tras las manifestaciones que se han hecho públicas por parte de los trabajadores de FCC y de la alcaldesa de Rota, que llegan a contradecirse, el consejo político de Izquierda Unida decidía reunirse en el día de ayer con representantes del comité de empresa de Fomento Construcción y Contratas (FCC), concesionaria del servicio de limpieza y recogida de basuras en el municipio.

De este modo, han explicado desde IU, han podido sacar varias conclusiones para poder hacer un posicionamiento claro con respecto a este asunto que destacan como prioritario por tratarse de una huelga que afecta a la salud pública.

Desde Izquierda Unida han sido claros al tachar de "falsedad" los mensajes lanzados por "nuestros máximos dirigentes políticos" poniendo en evidencia las declaraciones de la alcaldesa, Eva Corrales, cuando decía que el conflicto laboral venía motivado por un supuesto aumento de sueldo y de jornada. "Es falso que los trabajadores de FCC hayan pedido un aumento de sueldo y hayan roto las negociaciones de su convenio colectivo. La señora alcaldesa ha mentido cuando proclama a la opinión pública semejante afirmación", han afirmado desde IU dejando claro de este modo, de parte de quien están.
 
En esa línea, y tras su reunión con los miembros del comité, los izquierdistas señalan que lo que han pedido los trabajadores ha sido una congelación salarial para los años 2012 y 2013 conservando su antigüedad, por la que cobran un plus. Según IU, "este hecho en sí mismo supone una pérdida de poder adquisitivo por la subida del IPC y sobre todo por lo que va a suponer la subida del IVA a partir del próximo mes de septiembre. A salarios de mil euros no se les puede pedir una bajada en el sueldo de un 5 por ciento más la supresión de la paga de Navidad como a los empleados públicos, máxime, con el porcentaje tan alto de desempleo existente y que, probablemente, sea el único salario que entre en sus hogares", declaran desde el consejo político de esta formación.

En cuanto a la ampliación de jornada propuesta por la empresa y secundada por el Ayuntamiento tal y como ha manifestado la alcaldesa ante los medios, los trabajadores se oponen al incremento de horas de trabajo semanales "porque esta medida supondría la eliminación de los 18 puestos de trabajos  existente de fijos a tiempo parcial. Estamos hablando de personal contratado cuyo salario oscila entre los 300 y los 400 euros mensuales", refieren desde IU añadiendo que en todo este asunto, la labor de un equipo de gobierno "es o debería ser de mediadora entre la empresa y los trabajadores y no la de imponer y ponerse de parte completamente de los intereses de la empresa".
 
El portavoz de IU, Antonio Franco, ha hecho mención a la posibilidad de que el Ayuntamiento estuviera generando una nueva deuda con FCC, concesonaria del servicio de limpieza y recogida de residuos sólidos urbanos, cuando acaba de ponerse al día a través del Plan de Pago a Proveedores del Gobierno central, "sería chocante que esta situación sucediera y al mismo tiempo anden enfrascados en inversiones impropias e inadecuadas a las circunstancias actuales, -en referencia a la compra del Museo Ruiz-Mateos-".

En definitiva, para este grupo de la oposición, esta huelga de limpieza no debería ni siquiera haber empezado "porque si todas las huelgas reivindicativas conllevan un porcentaje de molestias hacia los usuarios, una huelga de basura atenta contra la salud pública. No se  trata ya sólo del aspecto estético que pueda presentar la localidad, que en este caso pasaría hasta un segundo plano, estamos hablando de salud pública", indican los izquierdista esperando que los responsables de la situación a tres bandas dejen sus desavenencias a un lado y puedan retomar las negociaciones del convenio colectivo para que la huelga de basuras termine lo antes posible intentando no perjudicar ni los intereses de la empresa ni los de los trabajadores.