Qué jodidos
La diputada del Partido Popular por Castellón, Andrea Fabra, no tuvo otra expresión más acertada que la que dijo en el Congreso de los Diputados al exclamar “que se jodan” cuando su grupo aprobó los recortes de bajadas de sueldos a los funcionarios y a los parados. Esta señora, que luego se retractó, no debería seguir ocupando un escaño que debe estar cubierto por una persona que verdaderamente luche por la igualdad y bienestar de todos y no por la de unos cuantos y sobre todo con respeto.
A los parados no les hace falta que les digan que se jodan, ya están jodidos por el simple hecho de estar parados, a los funcionarios no les hace falta que les digan que se jodan porque ya el anterior gobierno del PSOE empezó a joderlos con el recorte de salarios. Ahora, el gobierno del que se autoproclamó como el verdadero partido de los trabajadores no solamente les aumenta ese recorte sino que les quitan la paga de Navidad.
A la señora Andrea Fabra ni a ningún político o política se les eligen para que digan “que se jodan” sino para solucionar los problemas de España y cumplir y hacer cumplir la Constitución que tanta falta hace en esta España que ha sufrido el mayor golpe en recortes y derechos sociales desde que se aprobó la Constitución y disfrutamos de democracia.
Para terminar, espero que los máximos dirigentes del Partido Popular no solamente dejen de recortar sino que les exija a la señora Fabra la dimisión, es lo menos que puede hacer porque lo fácil es pedir perdón y seguir jodiendo con más recortes.
P.D.: Ah!, no sé, queridos lectores, si os habéis dado cuenta qué risueños están todos estos ministros cuando aparecen en los medios de comunicación anunciando los recortes y cuando dicen que ellos están cumpliendo el programa. Su programa es el que estamos sufriendo nosotros: el desmantelamiento del estado del bienestar, recortes laborales, subida de impuestos, etc. y dicen que todavía habrá mas recortes, qué jodidos, bueno nosotros.
Juan Manuel Pizones Rico

































Miguel | Lunes, 23 de Julio de 2012 a las 13:59:28 horas
PARA FLIPAR EN COLORES...
Erase una vez un comerciante de armas cuya empresa fabricaba bombas de racimo que vendía, entre otros, al gobierno de su país. Y resultó que su país firmó un convenio internacional contra esas bombas, que dejó de comprar. Entonces el comerciante denunció al gobierno por dejar de comprar esas armas (supongo que habría un contrato con la empresa fabricante que le comprometía a unas compras con sus correspondientes pagos). Y resultó que hubo un cambio de gobierno, y el nuevo presidente tuvo la ocurrencia de nombrar como ministro de Defensa a dicho comerciante de armas: ¿alguien lo puede mejorar? Ahora el comerciante, transmutado en ministro, pagará a su antigua empresa la indemnización correspondiente, un pellizquito de 40 millones de euros.
PREGUNTA: ¿de qué país y de qué época son estos hechos? ¿del quinto mundo? ¿de un pasado oscuro? La respuesta a continuación.
El Ministro de Defensa de España pagará 40 millones a su antigua empresa por prohibir las bombas de racimo.
Pedro Morenés, ministro de Defensa, fue consejero de la empresa de fabricación de armamento Instalaza entre 2005 y 2007. Después ocupó el puesto de representante hasta el 4 de octubre de 2011, según recoge el Boletín Oficial del Registro Mercantil. Instalaza fabricaba bombas de racimo.
El 31 de octubre de 2011, el diario Cinco Días reveló que Instalaza había decidido recurrir a los tribunales para pedir que el Gobierno le indemnizara con 40 millones de euros en concepto de desagravio por la prohibición del uso, almacenamiento y fabricación de las bombas de racimo en España como consecuencia de la firma del Tratado de Dublín. Sin embargo, esta empresa ya había anunciado en mayo de 2011, cuando Morenés era su representante, que pediría una compensación económica al Ejecutivo en concepto de "daño emergente y lucro cesante".
Hoy sabemos que Instalaza venderá la deuda a una tercera empresa que a su vez la revenderá y finalmente el Ministro pagará diciendo que no es su empresa la que cobra. El dinero saldrá de los impuestos de todos, naturalmente. Nuestro dinero pagando bombas que mutilan a niños. Porque las submuniciones esparcidas por las bombas fabricadas por Morenés tienen un rango de fallo de entre el 5% y 30%, por lo que pueden quedar bombas enterradas sin explotar siendo peligrosas tiempo después de terminada la guerra. Especialmente para los niños por sus formas llamativas, como pelotitas de tenis o latas de refrescos. Porque es así como las camufla la empresa del Ministro.
¿De verdad no había en todo el país otra persona que pudiera ser Ministro de Defensa?
POR FAVOR, MOVEDLO A TOPE PORQUE ES DE LOS MAYORES ESCÁNDALOS QUE ESTÁN PASANDO ... que ya es decir mucho
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