EL RIESGO DE NUESTRA PRIMA



   
  
A estas alturas de la crisis económica, aceptada ya como crisis financiera, resulta que lo primero que se tenía que haber reformado era a las entidades bancarias. ¡Ver y oír para creer! El gobierno Zapatero inyectó dinero a la Banca española para que el crédito fluyera entre las pequeñas y medianas empresas. Ahora, pasado algunos meses, se dan cuenta que no ha sido suficiente. Cada  vez estoy más convencido de que esto de la crisis es una pantomima. Lo peor de esta pantomima es que los perjudicados somos todos. Las medidas que los gobiernos están aplicando para “salir” de esta pantomima han traído más parados, más pobreza, más ajustes, más recortes, más reformas laborales...
Era como si la culpa de la situación creada fuera de la ciudadanía.

Con BANKIA “saltó la liebre”. Le han seguido otras entidades. Los balances de éstas son, por decirlo así, ficticios. Mucho activo reflejado en sus Cuentas por un valor “estratosférico”. Mucho ladrillo valorado por encima de la realidad. Mucho ladrillo y poco dinero. Ahí andan, intentando calcular cuál es la cantidad necesaria para “salir del atolladero”. El Ministro que trata estos asuntos no parece haber “caído de un guindo”, y habla de unos 100.000 millones de euros aproximadamente. Vamos, el Sr. Guindos cree que con esto se apañan los bancos españoles.
Pero, no nos asustemos tan rápidamente. Dice nuestro Presidente del Gobierno que semejante cantidad nada tiene que ver con el déficit establecido. Se trata de un “préstamo” a la Banca, no al Gobierno, no a los españoles. Por lo tanto, serán los Bancos los que tengan que devolver ese dinero a las lumbreras que nos sacarán de la crisis. En este caso, nuestro Estado actúa como avalista del préstamo. Al decir el Estado, podemos decir todos los españoles. ¡Otro ver y oír para creer! Para solicitar un préstamo a un banco tenemos que presentar un aval y ahora podemos presumir los españoles ante los bancos que ellos no cierran su chiringuito gracias a que somos nosotros sus avalistas, sus salvadores.

Sigo insistiendo que esto de la crisis huele a truco. Decían, y dicen, por activa y por pasiva, que no hay dinero para mantener el estado del bienestar tal y como lo hemos alcanzado, y aparecen unos milloncejos de euros para salvar a la Banca. Nos obligan a trabajar más años, ganando menos, con riesgo a que la empresa te despida cuando le venga en gana, recortando el salario de los funcionarios (no de todos, los de la policía antidisturbios no creo que lo hayan bajado), recortando derechos sociales, recortando recursos sanitarios, aumentando las matriculas para acceder a la Universidad…y un largo etcétera de ajustes y recortes, y todo ello con la justificación de que no hay dinero. Y, “vualá”, ahora sí hay dinero.

Analizando bien la situación, la táctica empleada ha sido genial. Genial para Ellos, claro.
Ea, ya tenemos una reforma laboral tal y como pedía la Patronal. Hemos vuelto a mediados del siglo XX en este sentido. Han dado no sé cuántas vueltas de tuercas al recorte de nuestros derechos. Han provocado el miedo entre la clase trabajadora. Incluso muchos ciudadanos se han convencido de qué esto es lo que había que hacer. Las cifras del paro han seguido aumentando. La inversión pública acortada. El terreno ya está preparado y abonado para salir de la crisis. Sólo faltaba inyectar más dinero a la Banca. Ya pueden volver a prestar dinero a los curritos de a pie. Los curritos de a pie, por si no se han dado cuenta, son las pequeñas y medianas empresas y los ciudadanos en particular.

Ahora ya podemos sentir los ojos vigilantes de Bruselas sin miedo a la censura. La Banca española se ha visto favorecida por el “Plan Marshall europeo” para su salvación.
Otro factor a tener en cuenta es nuestra prima de Riesgo. Que no entiendo yo eso de que, si la prima es de Riesgo, por qué los telediarios hablan de la prima de riesgo española. Podrían expresar, más bien, que tenemos una prima que tiene mucho riesgo. Pero ya no. Ahora con los bancos “nadando en dinero fresco”, y todas las medidas impuestas, que nos aprietan casi hasta la asfixia, nuestra prima no debe correr ya ningún riesgo.

Las cifras del paro deben sufrir una merma considerable. Habrá menos parado de aquí a unos años, no les quepan la menor duda, pero los que consigan un empleo lo harán en unas condiciones parecidas a la de nuestros abuelos. Y no creo pecar de exagerado. 

Otro factor será la bajada del precio de la vivienda. O no. Quién lo sabe. Si hasta ahora, los bancos ponían a la venta su stock inmobiliario a precios de antes de la crisis, ahora el precio de la vivienda debería ser menor, para vender más. Así podrían capitalizarse más aún. O puede que, teniendo ya crédito para llevar a cabo sus operaciones mercantiles, sigan manteniendo los precios actuales y sigan utilizando estos inmuebles como parte de activos engañosos. Yo no me fiaría nada de nada en este sentido.

Eso sí, si la roja, nuestra selección, vuelve a ganar la Eurocopa, ¿quién se va a preocupar de nuestra prima, la que tiene riesgo? Habrá que plantearse la “prima” que van a percibir los jugadores, que no es precisamente un ejemplo de la austeridad que se le pide al resto de los españoles.

Esteramos atento a los acontecimientos. Me refiero a la Eurocopa, también.
Salud.



                                                                                                      ANTONIO FRANCO GARCIA