Los trabajadores del aeropuerto de la Base Naval de Rota tuvieron la oportunidad este lunes de mantener un breve encuentro con la vicepresidenta del Gobierno, María Jesús Montero, durante su visita institucional a la localidad, concretamente en el edificio rehabilitado de la Plaza de España.

 Aunque se trató de una conversación informal, los representantes de la plantilla pudieron trasladarle directamente la situación de un conflicto laboral que se prolonga ya ocho años y que mantiene a la empresa en huelga indefinida desde 2017.

El comité recordó a la vicepresidenta que la adjudicataria del servicio, la multinacional Versar-Louis Berger Aircraft Services (LBAS), mantiene bloqueada la negociación del convenio colectivo, pese a las numerosas protestas, encierros en el Castillo de Luna, mediaciones y reuniones celebradas en los últimos años. 

A esta situación se suma el despido del presidente del comité de empresa, que tuvo lugar a finales de julio, el mismo día en que la compañía remitió un calendario de negociaciones, lo que los representantes interpretan como un nuevo episodio de “acoso” hacia la plantilla.

Los trabajadores denunciaron ante Montero que la empresa sigue utilizando “artimañas inmorales y deshonestas” con el único objetivo de amedrentar al personal, y recordaron que más de una treintena de empleados han perdido su puestodesde que se iniciara el conflicto.

Por su parte, la vicepresidenta se mostró cercana, aseguró conocer bien la situación y se comprometió a coordinar esfuerzos con distintas instituciones para impulsar una solución.