El servicio de Urgencias del centro de salud de Rota ha experimentado recientemente un cambio significativo en su funcionamiento de lunes a viernes. Desde principios de agosto, el municipio ha perdido al médico que hasta ahora cubría de forma específica el servicio de urgencias diurno, una reorganización interna que ya está teniendo consecuencias visibles en la atención sanitaria.

Según ha podido confirmar este medio, los usuarios que acuden al centro en horario de mañana o tarde son ahora valorados inicialmente por personal de enfermería a través del sistema de triaje, antes de ser derivados a uno de los médicos de consulta. 

Este nuevo modelo genera una doble espera: primero para la valoración inicial, y después para ser atendido por un médico que puede encontrarse en ese momento en una cita.

Este cambio de funcionamiento está provocando esperas que superan fácilmente la hora o incluso las dos, especialmente en los días de mayor afluencia. Además, en casos de urgencias graves, es uno de los médicos de consulta quien debe dejar su consulta para atender al paciente urgente, lo que interrumpe la atención al resto de usuarios con cita previa y genera aún más retrasos en el servicio.

Este nuevo modelo organizativo, que afecta únicamente a los días laborables, no se aplica los fines de semana ni festivos, cuando el centro sigue funcionando con su equipo habitual de urgencias y el equipo móvil, ambos con médico y enfermero. Sin embargo, las deficiencias que sufre el servicio durante los fines de semana también vienen siendo motivo de preocupación desde hace meses.

En distintos momentos, se ha denunciado la saturación del equipo de guardia durante sábados y domingos, con situaciones en las que el único médico de urgencias se ve obligado a salir con el equipo móvil mientras se queda sin atención médica el centro. Esta situación, especialmente en verano con el aumento de población, pone en evidencia la falta de recursos y la necesidad urgente de reforzar el servicio.

Con la retirada del médico de urgencias de lunes a viernes y las carencias estructurales que ya afectan a los fines de semana, profesionales y usuarios coinciden en señalar que el servicio atraviesa un momento crítico. La sobrecarga, los retrasos acumulados y la incertidumbre están deteriorando la calidad de la atención y generando una preocupación creciente entre los vecinos de Rota.