Las obras que se están ejecutando en la calle Carlos Cano para renovar la red de abastecimiento siguen avanzando en su segunda fase. Una intervención que se enmarca dentro del plan de inversiones de Aqualia y que responde a la necesidad de mejorar la infraestructura de agua potable en uno de los tramos más importantes del municipio.

Esta actuación contempla la sustitución de la antigua conducción de fibrocemento de 300 mm de diámetro, que había llegado al final de su vida útil, por una nueva tubería de fundición dúctil de 500 mm, mucho más resistente, moderna y con capacidad para transportar un mayor caudal instantáneo.

El objetivo es prevenir roturas en la red, minimizar las pérdidas de carga y, sobre todo, evitar los cortes de suministro de agua que afectaban a los vecinos, especialmente en los meses de verano, cuando las antiguas tuberías ya no daban respuesta a la demanda y provocaban inundaciones puntuales en la calle Carlos Cano.

Actualmente, la obra se encuentra en su segunda fase, que consiste en la conexión de la nueva conducción con la salida de la estación de bombeo del Consorcio de Aguas, ubicada en la intersección entre Carlos Cano y la plaza del Triunfo, lo que ha motivado el corte temporal del tráfico en esta zona.

La primera fase, ya finalizada, se centró en la instalación de la nueva conducción. Una vez completada esta conexión, todo el tramo quedará completamente renovado, modernizando una infraestructura esencial para garantizar el correcto funcionamiento del suministro a miles de vecinos.

Con estas actuaciones, el Ayuntamiento asegura que  continúa avanzando hacia una gestión eficiente del ciclo integral del agua, apostando por infraestructuras duraderas y sostenibles que mejoren la calidad de vida de la ciudadanía.