La piscina municipal se encuentra cerrada en estos días al público dado que desde la delegación de Deportes se está llevando a cabo algunas labores de mantenimiento y puesta a punto de la instalación deportiva y que va desde limpieza, a reparaciones y revisiones, que han obligado a que durante unos días no se pueda estar usando.

Según la delegación municipal, se trata de una "exhaustiva intervención" que se está realizando aprovechando el paréntesis entre la actividad que se viene desarrollando durante todo el curso que ya ha finalizado, y los cursos de verano que se llevarán a cabo en los meses de julio y agosto.

La delegada municipal de Deportes, Luisa Fernández, ha comprobado esta misma mañana el desarrollo de esta actuación que se realiza de manera regular cada año y que permite que la piscina mantenga "sus estándares de calidad y confort". Según ha detallado la concejal, los trabajos incluyen el tratamiento de legionela, el tratamiento íntegro de desinfección y la limpieza de agua fría y caliente, cumpliendo así con la normativa sanitaria en vigor. Además, también se está actuando sobre las instalaciones pintando el interior y el exterior de la piscina; realizando reparaciones en techos y ventanas; y llevando a cabo reparaciones de fontanería.

El tratamiento preventivo y correctivo de las instalaciones, junto con la limpieza en profundidad de zonas como los vestuarios, las gradas, etc., completan esta intervención, que incluye el vaciado de la piscina que se realiza en años alternos, en un 100% y en un 50%, y que en esta ocasión al ser un vaciado total permite una limpieza y pintado integral del vaso.

Está previsto que una vez se cuente con los resultados del tratamiento de legionela - imprescindibles para poner en marcha de nuevo la piscina-, la instalación  pueda volver a abrir sus puertas el próximo 1 de julio para iniciar la temporada de verano, con cursos para todas las edades, niveles y modalidades.