Alejandro, el roteño de 16 años que el pasado 6 de abril se desvaneció en la calle Charco sufriendo dos paradas cardíacas y fue reanimado en el lugar por dos sanitarios y dos agentes de la Policía Local, ha dado las gracias a las personas que le salvaron la vida. 

Gracias a ellos, que consiguieron estabilizarlo en el mismo sitio, pudo ser trasladado al hospital donde fue diagnosticado de arritmias cardíacas malignas. Ese episodio lo ha mantenido ingresado 45 días a la espera de la colocación de un Desfibrilador Automático Implantable (DAI) denominado Aurora. Con este dispositivo, puede hacer vida normal y desde el pasado 19 de  mayo está en casa recuperado. 

Tras un episodio que todos sus seres queridos quieren olvidar como un mal sueño, tanto Alejandro como su familia han querido dar las gracias especialmente, a los dos sanitarios que estaban en el momento del desvanecimiento en la calle, José Manuel García Corbeto y Lucía Arjona Luna, porque fue su pronta reacción al detectar que se trataba de un paro cardíaco lo que les hizo iniciar la reanimación cardiopulmonar a la que se sumaron los dos agentes de la policía. Ninguno cesó en el intento y el trabajo que hicieron los cuatro nunca lo olvidará esta familia roteña, que siente un profundo agradecimiento por su ayuda en un momento tan difícil. 

De igual forma, la familia y el propio joven han querido dar las gracias a todos los roteños y  personas que cuando estaban a la espera de que llegara la autorización  para colocarle el DAI, compartieron la desesperación que su madre expresó por redes sociales dándole muestras de apoyo y empujando para que el final fuera feliz como finalmente, ha sido.