La decisión del Ayuntamiento de Rota de volver a contar este verano con los lavapiés y duchas de playa operativos tras cuatro años sin hacerlo, por la pandemia del Covid-19 y la posterior situación de sequía, ha llevado a Ecologistas en Acción 'La plazoleta' a tildar de "incoherente" y "falto de rigor" al gobierno municipal en sus políticas medioambientales. 

La decisión sorprende a este colectivo por varias razones, especialmente, por hacerse celebrado recientemente la Asamblea de la Red Española de Ciudades por el Clima (RECC) en la localidad, y días después, anunciar esta medida que entienden los ecologistas que contraviene la lógica. Y es que aunque es cierto que los embalses presentan mejor situación que hace un año gracias a las lluvias de este invierno y primavera, desde 'La plazoleta' señalan que eso no justifica que se pueda "derrochar" un bien necesario y escaso como el agua. 

Si hace poco más de dos semanas se celebraba en Rota esa asamblea de la RECC, para intercambiar experiencias e iniciativas para mitigar los efectos del cambio climático, Ecologistas en Acción no logra encontrar motivos por los que justo días después se tomen medidas que generarán "un gasto desproporcionado de nuestros recursos hídricos" y por tanto, muy alejado de ser una "actuación sostenible, independientemente del estado en el que se encuentren los pantanos".

Este colectivo recuerda que algunos de los principales efectos adversos del cambio climático son las sequías frecuentes, severas y duraderas, el aumento de la temperatura, calentamiento del clima en casi 2 grados Celsius, olas de calor prolongadas y frecuentes, desertificación del planeta, erosión y degradación del suelo, entre otras. La sequía, continúan, afectan gravemente a la agricultura, la ganadería, la silvicultura, la humedad del suelo, la biodiversidad e incluso al turismo,  ya que sin agua difícilmente se podrá mantener la oferta hotelera.

Por otro lado, señalan desde este grupo que el nivel del agua de los ríos desciende, así como el de las aguas subterráneas lo que conlleva una disminución en el crecimiento arbóreo y de los cultivos, aumentan las plagas y se recrudecen los incendios forestales. Datos científicos estiman en aproximadamente 9.000 millones de euros las pérdidas anuales ocasionadas en Europa por la sequía, sobre todo en la agricultura, el sector energético y el abastecimiento público de agua; estas sequías son cada vez más frecuentes y extremas y también más graves los daños que ocasionan.

Ecologistas reconoce que  desconoce las experiencias que los responsables de las localidades asistentes a la Asamblea por el Clima celebrada en Rota trasladaron sobre su lucha contra los efectos del cambio climático y, en concreto, frente a la escasez de agua, pero entienden que la instalación del servicio de duchas y lavapiés seguro que no era una de ellas. 

Si el Ayuntamiento de Rota se ha definido como “un municipio con un alto nivel de compromiso con la implementación de políticas y estrategias dirigidas tanto a mitigar las causas del cambio climático, como a adaptarse a sus impactos” y comprometido en “promover la eficiencia energética, la gestión de residuos y del agua, la movilidad sostenible y la protección de los espacios naturales. Todo ello, con la intención de lograr un modelo de desarrollo ambientalmente responsable y socialmente justo, contando con la colaboración de diferentes agentes de la sociedad y la administración”, a los ecologistas no les cuadra estas decisiones asegurando que son fruto de la incoherencia del gobierno local.

En su denuncia, reiteran que el servicio de duchas y lavapiés en las playas de Rota es un derroche de agua "totalmente injustificado, innecesario e insostenible" e  incompatible con la Red Española de Ciudades Saludables, la Red de Destinos Turísticos Inteligentes o el Sistema Integral de Calidad en Destino Turístico, espacios en los que está presente el Ayuntamiento de Rota, ya que la calidad y salubridad de una localidad debe venir determinada por el eficiente uso de sus recursos y su compromiso e implicación con la mejora de la calidad de vida de su ciudadanía y la protección del medioambiente para futuras generaciones, señalan.

A eso se suma que la operatividad y disponibilidad de las duchas y lavapiés también va a suponer un coste económico a las arcas municipales no solo debido a su instalación sino porque también precisan de una revisión y reparación tras tantos años sin utilizarse. 

Ecologistas en Acción se mantiene en contra de estos servicios y pide que no se realice un mal gasto de agua empezando desde el Ayuntamiento con una actitud ejemplarizante y no cayendo en contradicciones entre lo que se dice y lo que se hace. Como muestra, este grupo ha recordado unas palabras del pleno del 27 de febrero de 2020, en las que se aprobaban medidas contra el cambio climático, manifestando entonces el gobierno local su compromiso responsable.

Ecologistas concluye que volver a contar con duchas y lavapiés "no tiene ninguna justificación posible, cuando la no disponibilidad de los mismos era una situación ya totalmente aceptada por la ciudadanía", y alude a la responsabilidad, concienciación y educación que solo es posible, ha dicho, cuando no haya una situación extrema en la que haya que tomar medidas de forma obligatoria. 

"La gravedad de los efectos causados por el cambio climático dependerá de la trayectoria de las actividades humanas. No proteger nuestros recursos naturales, como el agua, no es una medida de lucha contra el cambio climático", concluyen.