Un día más, los trabajadores de la empresa Construcciones Sixto han permanecido con su pancarta en la plaza Pío XII, frente a la sede de la empresa a la que reclaman el pago de cinco nóminas atrasadas. El panorama, pese a sus intentos de desbloquear la situación, sigue siendo el mismo. No tienen soluciones y siguen sin cobrar.

El pasado lunes, según ha informado uno de los trabajadores a este periódico, la alcaldesa de Rota, Eva Corrales, junto a los representantes de los diferentes partidos políticos de la localidad, se reunína con miembros de la empresa Sixto para abordar la situación que ha desencadenado el impago de los salarios a una veintena de trabajadores que están desesperados por cobrar. Según Rafael Jiménez, que hace de portavoz del colectivo, en esa reunión el empresario explicó la situación que padece en la que según los trabajadores, tiene una deuda con la Seguridad Social, motivo por el cual, aunque intente vender propiedades y adquirir dinero en metálico, no lo consigue porque la Seguridad Social "se lo absorbe".  Aún así,  manifiesta el portavoz del colectivo, la alcaldesa de Rota les transmitió el mensaje de que el empresario confía en pagar las nóminas "que son una prioridad". Una declaración de intenciones que la propia Eva Corrales trasladaba en el día de ayer a los trabajadores que se muestran bastante escépticos ante esta noticia "porque no nos lo creemos, ya nos ha engañado varias veces". Además, explica Rafale Jiménez, "según nos dijo la alcaldesa, hay una empresa que está interesada en hacerse cargo de la empresa y de nuestra nóminas, pero no nos lo creemos porque ¿quién va a hacer algo así?", se pregunta el trabajador desesperado porque según denuncia, los gerentes de Construcciónes Sixto "no dan la cara, que es lo que más nos preocupa".

Aunque los partidos políticos se han puesto a disposición de los trabajadores para echarles una mano en asesoramiento o arreglo de documentación, el colectivo no ve salida y pide una solución real que les lleve a solucionar los problemas de deudas que están contrayendo por culpa del impago de sus nóminas. "La empresa  no está poniendo nada de su parte y aunque uno de los hijos habló con nosotros para decirnos que en esta semana se nos llamaría, la verdad es que estamos a miércoles y aquí nadie ha llamado a nadie, así que es difícil creernos que este señor diga que su prioridad es pagarnos", comenta Rafael Jiménez.

Así las cosas, los trabajadores afectados por el impago de sus sueldos están cada vez más preocupados y desesperados, no quieren ni pensar las navidades que pasarán y el resto de días que les queda viviendo lo que ellos llaman un verdadero calvario. Por eso, piden a la empresa que reaccione, que les pague y que esta situación se desbloquee y se solucione para ambas partes.

Aunque se mantienen en la plaza Pío XII con su pancarta, no descartan nuevas movilizaciones. De momento, aunque lla gran mayoría ya ha denunciado, no piensan dejar las cosas como están.