De cara a la seguridad necesaria para la noche del 31 de diciembre, en la que muchos son los ciudadanos que tras las campanadas salen a la calle para disfrutar de la llegada del nuevo año, desde la Policía Local y Policía Nacional de Rota se ha establecido un servicio extraordinario de noche que estará presente tanto en la plaza de España, donde se prevé la fiesta que organiza el Ayuntamiento de Rota, como en el entorno del Camino Santa Teresa.   En este último caso, el dispositivo se centrará especialmente en el tráfico, ya que según se ha acordado por parte de la junta local de seguridad, se restringirá la circulación en doble sentido a los vehículos para evitar que en las horas puntas de entrada y salida al cotillón que hay en la finca 'Los Caimanes', se puedan producir accidentes. 

Hay que tener en cuenta que esta fiesta de cotillón, que es la única autorizada en Rota, prevé la asistencia de unas 1.200 personas, por lo que tras las campanadas, el movimiento de jóvenes sobre todo, será muy alto. Como medida preventiva, y atendiendo a una demanda del sector del taxi para poder realizar carreras de forma más rápida y dando un mejor servicio al ciudadano, serán estos vehículos los únicos que podrán transitar por este camino en doble sentido para llegar hasta la finca en la que se celebra la citada fiesta de fin de año durante toda la noche.

Para el resto de vehículos, desde las 00.15 horas hasta las 3 o 4 de la madrugada  del día 1 de enero, la circulación será desde la rotonda de los agricultores  hacia 'Los Caimanes'  por el Camino Santa Teresa, con salida por la rotonda de la venta 'Los Cabales'. Los particulares deberán hacerlo en ese  único sentido. A partir de esa hora, es decir, sobre las 4 y hasta las 7.30 aproximadamente, desde la rotonda dedicada a los agricultores hasta 'Los Caimanes', solo podrán acceder los taxis para recoger a personas que salgan del cotillón y el resto de coches deberán hacerlo entrando desde la rotonda de Los Cabales hacia Rota.

Con ello, según ha trasladado Policía Local a este medio, se intenta evitar circulación en doble sentido y el posible colapso en el tráfico por un alto número de vehículos como ya ocurrió en alguna ocasión o que ante la imposibilidad de los taxis de llegar a la zona, la gente comenzara a andar por el margen de la carretera dirección a Rota, con el consiguiente peligro que ello supondría para la seguridad de todos.

El Camino Santa Teresa es una carretera secundaria con poco arcén y con curvas en las que hay poca visibilidad, así que se quiere evitar el riesgo que supondría que personas que han bebido alcohol cojan el coche en un tramo en el que se prevé mucho movimiento. Por eso, para los coches particulares solo habrá un sentido de circulación que cambiara en función de la hora de entrada y salida del cotillón.

La organización de la fiesta cotillón ha puesto a disposición autobuses para llegar al lugar de celebración, por lo que las autoridades recomiendan su uso  y nunca le coche o moto particular.