Más de seis años suma la Plataforma Roteña en Defensa de lo Público concentrándose cada lunes para pedir unas pensiones dignas para todos. Ni el frío, ni el calor, el viento o incluso la lluvia desgasta a este grupo de personas que tiene claro que la lucha debe seguir en la calle y como ejemplo, se mantienen semanalmente fieles a su cita. 

Desde el Castillo de Luna, pasando por la plaza de España, plaza Jesús Nazareno y desde algún tiempo en la plaza de San Roque, se les puede ver con el chaleco amarillo y la pancarta en la que se lee "en defensa de lo público". Y es que esta plataforma que se inició con la reivindicación de unas pensiones justas, amplió al poco tiempo su espectro de lucha a otros servicios públicos como la sanidad o la educación.

Precisamente, con la sanidad en Rota tienen también otra cita semanal en la que reivindican el nuevo centro de salud muchas veces prometido pero del que poco parece que se avanza. Por eso, han avanzado a este medio que la plataforma ha solicitado a la delegada territorial de Salud y Consumo en Cádiz, Eva Pajares, una reunión para poder ponerse al día sobre las intenciones de la Junta de Andalucía con respecto a este proyecto.

Ayer lunes, los miembros de la Plataforma Roteña en Defensa de lo Público volvían a gritar sus habituales consignas a favor de las pensiones justas como hicieron el sábado con una concentración con la que quisieron apoyar a los compañeros que se manifestaban en Madrid.

Los pensionistas de Rota se quejan de la poca visibilidad que se le ha dado en los medios a esta manifestación nacional asegurando que, pese a ello, seguirán en la lucha.

Sus principales reivindicaciones siguen siendo mostrarse contra la privatización de las pensiones y contra quienes quieren hacer negocio con ellas. Solicitan acabar con la brecha de género en el acceso a las prestaciones y que se reconozca la situación de la mujer en la acumulación del derecho a pensión que queda penalizada cuando enviuda. Además, vienen reclamando la subida de los salarios y de las prestaciones con el IPC real, así como el cumplimiento de la Ley de Auditoría en la Seguridad Social para que las cuentas salgan a la luz, convencidos de que el sistema es sostenible pese al relato que indica lo contrario.

Entre otras de sus reivindicaciones piden que la edad de jubilación se fije en los 60 años y que no haya recortes de pensiones a aquellos que se jubilan de forma anticipada habiendo cotizado más de 40 años.

En definitiva, unas pensiones justas y acordes al precio de la vida.