Sobre las diez de la noche llegó ayer la Hermandad del Rocío de Rota a la Casa Hermandad en la aldea almontela, dando por finalizado un camino que se ha desarrollado con un magnífico ambiente entre peregrinos, temperaturas alejadas del calor que lo hace más duro y sin incidentes graves a destacar.

Los rocieros llegaron algo cansados pero con toda la energía y ganas de empezar a vivir la romería con total plenitud en una aldea que ya está repleta de romeros esperando el día grande de reencuentro con la Blanca Paloma.

Ayer, a la entrada de la carreta en la casa, vítores a la virgen, cante, emoción, lágrimas y devoción se mezclaron en un ambiente que a la vez, es festivo. Tocaba descansar para recuperar fuerzas y disfrutar de toda la jornada de hoy.

Mañana sábado las hermandades rocieras se presentarán ante la Hermandad Matriz de Almonte, Rota es de las más antiguas y aunque hoy es día de descanso en general y de alternar cada uno a su aire, se está pendiente de tener todo preparado para hacer una presentación digna, uno de los momentos más destacados del Rocío.

La hermandad roteña ha vivido una primera parte llena de vivencias, de fe, de baile, cante y convivencia. Ayer además, se llevaron a cabo los tradicionales bautizos a los rocieros que hacen por primera vez el camino. Fueron bautizados como manda la tradición, acompañados de sus respectivos padrinos, en una ceremonia muy emotiva en la que estuvieron presentes el director espiritual de la hermandad, el párroco Roberto Romero, y el hermano mayor, Rafael Caraballo.

Niños de apenas meses y adultos que han vivido su primera experiencia, recibieron el nombre de romero mientras se regaba la cabeza y se les bendecía.

Abandonar el coto y enfilar los últimos kilómetros hasta llegar a la aldea de El Rocío siempre se vive como un momento especial.

Son como siempre, imágenes que deja el Rocío para el recuerdo individual.

Os dejamos algunas fotos variadas de ayer, antes de llegar a la Casa Hermandad, donde hoy los rocieros roteños siguen compartiendo momentos de alegría, fe y fiesta.