Los roteños arropan al Amor y la Esperanza en un Lunes Santo muy concurrido
Hasta el último momento tuvo que apurar la Hermandad del Amor de Rota para decidir si ponía un pie en la calle o se quedaba en capilla. La inestabilidad meteorológica que está marcando la Semana Santa en su inicio, y que parece que se va a mantener a lo largo de los días, puso en peligro el Lunes Santo y llegó a barajarse la posibilidad de que, al igual que el Domingo de Ramos, no hubiera procesiones. Pero finalmente, tras varias reuniones de la junta de gobierno y analizar los partes meteorológicos más cercanos a la hora de salida, se decidió retrasar esta en una hora y con ello, que hubiera estación de penitencia.
Mientras la hermandad decidía en el interior de la parroquia de Nuestra Señora del Carmen qué hacer, los roteños se habían ido agolpando en la calle Calvario deseando que las puertas se abrieran, pero tuvieron que esperar desde las seis, hora prevista, hasta que finalmente, a las siete, y con aplausos incluidos, el diputado mayor llamaba a la puerta y por fin, se veía la cruz de guía por el dintel.
Este Lunes Santo ha sido de los más concurridos, con mucho público en la calle desde el principio y es que el hecho de que ayer la Semana Santa comenzara truncada sin La Borriquita, hacía llegar a este segundo día con las ganas multiplicadas.
También influye que muchos cofrades aprovechan el lunes para irse a localidades vecinas, especialmente Jerez o Sevilla, pero en vista de que la lluvia también estaba afectando en esas zonas, había más gente en Rota. De esta forma, el Santísimo Cristo del Amor y Nuestra Señora de la Esperanza del Calvario han procesionado arropados por muchos ciudadanos que han esperado pacientemente la espera porque hay que señalar que la salida y el primer tramo de recorrido, se ha prolongado en bastante tiempo.
Como cada año, dadas las dimensiones de la puerta de la parroquia del Carmen, los pasos tienen que salir prácticamente desmontados. En el caso del Cristo del Amor lo hace tumbado y en esta ocasión, sin las potencias que iba estrenando y que se le han colocado una vez en la calle. En total, unos 20 minutos, a los que ha habido que sumar otros 20 para poder ver a la virgen salir, con el paso igualmente a medio montar, y sin la corona de plata, cedida por la Hermandad del Nazareno de Rota, que se le ha colocado una vez fuera. Por lo tanto, la salida hasta que el cortejo ha echado a andar, ha durado una hora prácticamente, que muchos roteños y visitantes han esperado pacientemente llenando las calles.
Dos momentos claves se han vivido en el inicio de la salida procesional, uno de ellos ha sido la primera levantá del Cristo del Amor que su capataz, José Antonio Moreno Puyana, junto a su madre, ha realizado dedicándosela con sentidas palabras a su padre fallecido. Era el nieto de este el que asentía desde las trabajaderas para levantar con impulso el paso al golpe de llamador. Se ha vivido mucha emoción provocando un nudo en la garganta a más de uno. El otro momento, venía de manos de la cantante Rocío Ruiz, que a pie de acera le ha dedicado una plegaria a la Esperanza del Calvario con su vozarrón y arte, mientras la cuadrilla de cargadoras, todas mujeres, iba girándola para enfilar los primeros metros de su estación de penitencia.
A partir de ahí, y quizás algo lento, se ha desarrollado el primer tramo de salida procesional en una noche fría, en la que sopla algo de viento y en la que se mira al cielo con el deseo de que la lluvia aguante y permita que la recogida se desarrolle según lo previsto.
Pese a la espera, el Amor y la Esperanza han podido salir a la calle para alegría de muchos cofrades. Este año, el cortejo lo componían unos 100 hermanos entre penitentes, costaleros y cargadoras, destacando un buen grupo de niños en la pavera que la Hermandad del Amor, como todas, necesita para afianzar la cantera. Además, iba una representación de la Hermandad del Rocío, con quien comparten sede canónica, y el paso de la virgen desfilaba escoltado por una pareja de guardias civiles.
La Banda de Cornetas y Tambores Santa Bárbara de La Línea de la Concepción (Cádiz) con el Cristo del Amor y la Banda Municipal de Música de Barbate, con la Esperanza del Calvario, han marcado los sones de esta salida procesional con marchas que en más de un punto del recorrido han sido aplaudidas.
La Esperanza del Calvario ha lucido espléndida con la saya burdeos con apliques bordados cedida por la Hermandad del Polígono San Pablo de Sevilla, su manto verde de terciopelo que estrenó el año pasado, y la corona de plata que ha cedido para la ocasión la Hermandad del Nazareno de Rota.
José Álvarez Moreno y José Antonio Moreno Puyana, capataces de los pasos, han marcado el devenir de esta estación de penitencia, la primera de la Semana Santa de Rota 2024 en la calle.
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