Dar de comer a las palomas es una práctica que aunque parece inofensiva, puede acarrear serios problemas de salud  y eso es lo que quieren evitar algunos ciudadanos que han detectado, y denunciado, que en la avenida María Auxiliadora hay vecinos que estarían esparciendo casi a diario comida para estos animales atrayéndolos cada vez más.

El problema es que aunque este es un gesto que muchas ordenanzas municipales de ayuntamientos de España recogen como prohibida y conlleva sanción económica, en Rota, ni la Ordenanza Reguladora de la tenencia de animales de compañía y potencialmente peligrosos, ni la Ordenanza de Policía y Buen Gobierno, tienen un apartado específico para ello, por lo que, aunque esta práctica ha sido denunciada en la Policía Local por algunos vecinos afectados por la situación, no se ha actuado de forma directa.

La cuestión es, según traslada un vecino y corrobora con vídeos y fotografías, que hay personas de la avenida María Auxiliadora, especialmente en el tramo entre la gasolinera y la calle Huelva, que  esparcen pienso en el acerado y eso, como es lógico, atrae a las palomas que buscan comida. La preocupación salta porque cada vez son más ejemplares los que se han acostumbrado a comer en esos puntos, donde encuentran comida con facilidad, dejando a su paso, excrementos en azoteas, ropa tendida, placas fotovoltaicas, pretiles,  mobiliario urbano, etc., que quedan manchados. Pero no solo eso, las palomas son portadoras de parásitos externos como chinches y garrapatas y de enfermedades contagiosas como la histoplasmosis, la salmonelosis y la criptococosis, que se añaden a las transmitidas por cucarachas, ratas y otros insectos. Darles de comer en la calle puede provocar un aumento incontrolado de la población pudiendo llevar a la nidificación en la zona, que es cuando el problema se convertiría en especialmente grave. Antes de que llegue ese momento, vecinos de la avenida María Auxiliadora quieren impedir la situación y para ello, desde hace al menos tres meses, vienen enviando a la Policía Local y a la delegación de Sanidad correos con fotografías en los que se indica el problema, sin que hasta ahora se haya actuado para atajar lo que en el futuro, sí podría ser un importante inconveniente para la convivencia. Aunque se ha dado respuesta, ninguna ha sido de actuación contundente o al menos, que haya evitado que se siga dando de comer a las palomas, ya no solo en ese punto, sino que en alcorques de la avenida de la Marina, también se puede ver restos de grano con el mismo objetivo, pero no hay norma específica en Rota que lo impida.

Por otro lado, la preocupación vecinal también viene por el temor de que la comida que se le echa en la calle a las palomas se convierta en un reclamo para las ratas, como ya han visto en más de una ocasión que está sucediendo. Los roedores acuden a los lugares en los que se acostumbran a encontrar alimento, y parece (por fotos y vídeos grabados por los propios vecinos), que este punto de la avenida María Auxiliadora se está convirtiendo en una zona frecuentada.

La petición vecinal es que se actúe vigilando a los ciudadanos que se dedican a esparcir pienso en la vía pública para alimentar a las palomas y tórtolas y con ello, atraer a roedores, y que se les llame la atención sobre este hecho aludiendo a una cuestión de limpieza de la via pública y salubridad. Además, darles de comer les puede crear una dependencia que también es perjudicial para la especie.

Los afectados solicitan al gobierno local que plantee una modificación de la ordenanza municipal en la que, como en otros ayuntamientos, se pueda prohibir esta práctica y se sancione con multa económica a quien la lleve a cabo. En ciudades como Madrid, la Ordenanza Reguladora de la Tenencia y Protección de Animales,  fija sanciones entre 150 y 300 euros por considerar falta leve, pero puede llegar hasta los 750 euros si se aplica la normativa recogida en la Ordenanza de Limpieza de los Espacios Públicos y Gestión de Residuos, que también prohíbe dar de comer a los animales en la vía pública.  Tomando como modelo estas ordenanzas, los vecinos piden una modificación para que en Rota se pueda actuar con contundencia ante este tipo de situaciones, evitando problemas en el futuro.