Un tramo de balaustrada del paseo marítimo del Rompidillo se ha visto gravemente afectado por un acto vandálico que ha sucedido en estos días y que ha obligado a precintar la zona a la espera de su reparación.

Los hechos no son nuevos y ya a finales del mes de diciembre se detectó que se había realizado una fogata junto a la balaustrada de la bajada a la playa de Galeones, dejando algunos desperfectos. Unas semanas más tardes, en ese mismo punto del paseo marítimo, ha aparecido la valla destrozada con el consiguiente peligro que ello conlleva para los usuarios ya que ha dejado la zona sin protección entre el paseo y la zona del talud.

Desde la delegación de Playas han confirmado a este medio que se trata de un acto de vandalismo reiterado que ha acabado por hacer caer la barandilla. De momento, aunque está precintada para evitar que personas se acerquen, se pide precaución en el paso.

Dado que los materiales que se necesitarían para reponer el daño son actualmente difíciles de encontrar porque han dejado de fabricarse, se está valorando cómo solucionar la situación para devolver a la zona su imagen buscando alternativas que subsanen las consecuencias provocadas por quienes han causado los destrozos.