Como reza San Juan 8: 7- 8: “aquel de ustedes que esté libre de pecado, que tire la primera piedra”.

Es verdad que todos los partidos políticos utilizan la publicidad, la propaganda, e incluso los “fake news” pero, como en todo en la vida, hay aficionados y profesionales.

Hemos visto que se ha llegado a convencer a mucha gente, añadiría que, por aplastamiento, que pactar con Vox es poco menos que asesinar a millones de judíos en campos de concentración, pero pactar con Bildu está bien y es progresista.

Si se hiciera un análisis neutral y objetivo, la realidad es otra: Vox no ha delinquido y Bildu sí que ha participado en delitos gravísimos. Es más, no solo Bildu, cualquiera de los actuales socios de investidura de Sánchez es mucho peor que Vox y con gran diferencia. Pero la capacidad de propaganda de Moncloa se ha demostrado sobrecogedora. Por ejemplo, que el PSOE pacte con el partido comunista es un tema progresista y de izquierda moderada.

No hay nada más radical y de ultraizquierda.

Por cierto, ambos partidos tienen una historia muy lamentable que parece que no se puede recordar, regadas de víctimas mortales y demostrando ser profundamente antidemocráticos (véase la huelga general revolucionaria de 1934 con Largo Caballero e Indalecio Prieto). El PSOE de 1934 tuvo parte de culpa de la guerra civil y el que no lo quiera ver no conoce la historia de España.

Tanto la Pasionaria como Galarza (PSOE) amenazaron de muerte a Calvo Sotelo en el parlamento y lo mataron “mandados” del PSOE poco después. Casi de seguido estalló la guerra civil.

Hemos visto con estupor cómo el partido de los ERE, explica en el Parlamento una moción de censura por higiene democrática y para evitar la corrupción. ¡Frótense los ojos!

Más recientemente han explicado, sin ningún empacho, que han ganado las elecciones cuando las han perdido y que España ha votado un gobierno progresista cuando las fuerzas de izquierda tienen menos votos y menos diputados que las conservadoras.

Ya lo de llamarse progresistas a mi es que me da la risa. ¿Progreso de quién?

Un síntoma de progreso son los países a los que quiere emigrar la gente a trabajar porque se gana un buen sueldo y se vive bien. Normalmente no están gobernados por la izquierda, sinónimo de mala gestión y de pobreza económica.

Volviendo a la propaganda, es curioso ver cómo temas absolutamente menores como los famosos trajes de Camps abrieron decenas de telediarios y fueron portada de periódicos durante años y otros de enorme gravedad se mencionan  “sotto voce”. En este punto me quiero parar en el caso “Pegasus”.

España tiene una postura coincidente con la ONU en cuanto a la autodeterminación del Sáhara y, de repente se conoce que (muy posiblemente) Marruecos ha conseguido, vía Pegasus, el móvil de Sánchez.

De la noche a la mañana, sin llevarlo al Parlamento ni consultar al líder de la oposición ni niños muertos, Sánchez decide que lo mejor es que el Sáhara pertenezca a Marruecos.

¿Detectan ustedes el tufillo?

Soy yo o lo que parece es que una potencia extranjera extorsionó al Presidente del Gobierno de España. Soy yo o le dijeron que o cedes con el Sáhara o publicamos todas las indecencias de tu móvil y tienes que dimitir.

¿Este asunto capital por qué no abre cada telediario, por qué no lo preguntan con insistencia los periodistas? ¿Es que no les parece a ustedes más relevante que los trajes de Camps?

Ya me marcho.  Es que lo de la propaganda da para mucho, hay un señor (bastante calvo y tonto) que le dio un beso a una futbolista y tuvo que dimitir; por poco lo linchan. ¿No creen ustedes que el presidente ha hecho más méritos para que lo pongan de patitas en la calle?

Yo creo que sí.