Con el objetivo de adaptar la Ordenanza Reguladora de las Bolsas de Trabajo del Ayuntamiento de Rota a situaciones que se ajustan más a la realidad actual, no solo a nivel técnico y legislativo sino con puntualizaciones concretas, en especial, aquellas que tienen que ver con el acceso a la bolsa de trabajo de emergencia social, se va a aprobar en el próximo pleno una serie de modificaciones.

Esta mañana, la delegada de Gobernanza Pública, Encarna Niño, se ha encargado de dar a conocer algunos de esos cambios que se producirán en la ordenanza y que, por una parte, son técnicos, sobre todo, para adaptarse a lo cambios legislativos que se han ido dando a nivel nacional, como la nueva Reforma Laboral que aprobó el Gobierno central o a la ley para erradicar la temporalidad en el empleo público que se tiene que ver reflejada en la ordenanza local; por otro lado, son cambios sugeridos por el auditor de cámara de cuenta; y por último, para dar respuesta a situaciones que en estos años desde el Ayuntamiento han visto que se producen en los aspirantes a entrar en la bolsa y que podrían mejorarse para ampliar el radio de cobertura.  Especialmente afecta a criterios a la hora de quienes quieren acceder a la bolsa de emergencia social que está destinada a colectivos más desfavorecidos y que por los baremos actuales tanto en ingresos, miembros de la unidad familiar o tiempo último de desempleo, se ven afectados de forma negativa en las puntuaciones para entrar.

Por ejemplo, en lo que respecta a las modificaciones para adaptarse a la normativa actual y que afecta a los artículos de la actual ordenanza número 5, 7, 8 ó 12, se establece que cada vez que haya un proceso selectivo para ocupar una plaza en el Ayuntamiento de Rota o sus empresas, se debe generar una bolsa de trabajo y que esta esté reglada dentro de los criterios de la ordenanza. Y es que aunque esto ya se venía haciendo, Encarna Niño ha indicado que no estaba establecido de forma explícita en el texto de la ordenanza y de ahí, su modificación para incluirlo. De igual forma, se establecerá que los listados de bolsa sean definidos, es decir, que deben recoger de forma concreta el número de personas que van a formar parte de los aspirantes y los que estén como suplentes; se establece a sugerencia del auditor de cámara de cuentas que las bolsas tengan una vigencia temporal máxima de tres años; y se concretan cuáles son los criterios de desempate en caso de que dos o más aspirantes tengan la misma puntuación.

La delegada municipal de Gobernanza Pública ha indicado que a este respecto, aunque ya se hace en base a la norma legal a nivel nacional, en muchos casos no está por escrito en la ordenanza municipal, y por ello, se modificará para recogerlo.

Por otro lado, se añadirá que en caso de baja temporal de la bolsa, porque por ejemplo el aspirante haya conseguido otro empleo, o por circunstancias personales, este tendrá que solicitar de nuevo su incorporación a la bolsa de trabajo. Una situación que Encarna Niño ha indicado que se ha dado en el día a día y que había que dejar recogida de forma clara para no llegar a controversia en la aplicación de criterios a la hora de la selección.

Cambios en la bolsa de emergencia en los ingresos, unidad familiar o tiempo de desempleo

En las modificaciones que se aprobarán, las que mayor calado tendrán son las que se incluirán en el apartado de la bolsa de trabajo de emergencia social que afectarán a varios criterios que hasta ahora se consideran que excluye a un porcentaje de la población que también tiene derecho a aspirar a un puesto de trabajo en la administración pública a través de este proceso selectivo. Según Encarna Niño, estos cambios vienen a intentar reconducir esa situación.

En el aspecto económico, como ha señalado la delegada municipal, a la hora de baremar  siempre ha primado la escasez de ingresos de una persona para obtener mayor número de puntos. Para ello, se tiene en cuenta  el IPREM (que está en un máximo de 600 euros al mes de ingresos)  como indicador base, al que se le iba añadiendo  un 0,25% de ese IPREM por cada miembro de la unidad familiar para tener una perspectiva de los ingresos de la unidad familiar del aspirante. Pero se da la circunstancia de que en los últimos tiempos, el Salario Mínimo Interprofesional ha subido considerablemente, hasta 1.080 euros, por tanto, ha habido personas que solo habiendo trabajado un mes cobrando ese salario, se han visto perjudicadas aunque el resto del año hubieran estado en desempleo ya que sus últimos ingresos constaban muy por encima de lo que marcaba el IPREM. Por tanto, lo que se va a modificar será que para el baremo económico se considere este mismo indicador pero aumentado, es decir, estableciéndose que el solicitante podría llegar hasta 1,5 veces el importe de IPREM y por cada miembro adicional de la unidad familiar, se añadiría el 0,25% sobre ese importe.  De esta manera se quiere evitar la descoordinación que había entre salarios reales en el mercado y lo marcado en la ordenanza.

Por otro lado, en estas modificaciones se ha tenido en cuenta a los mayores de 60 años porque es un sector de la población que tiene muchas dificultades para acceder a un empleo en el ámbito privado y desde el gobierno local se entiende que la bolsa de empleo público puede ser para ellos una opción que hasta ahora no los contemplaba como colectivo vulnerable. Lo que se hará, como ha explicado la delegada de Gobernanza Pública, será que para los mayores de 60 años se establecerá como máximo de ingresos 2 veces el IPREM, para que aunque tengan un poco más de ingresos, tengan opciones para entrar en la bolsa de emergencia.

Otro cambio importante será la puntuación por tramos de edad considerando que  quienes tienen entre 55 y 66 años lo tienen peor en el mercado laboral, y por tanto,  en esta ordenanza modificada para acceder a las bolsas de emergencia social este colectivo tendrá más puntuación en las baremaciones. Si ante las personas entre 55 y 66 años obtenían 3 puntos en la baremación, ahora con este cambio, se dará 10 puntos a los que tengan entre 60 y 66 años; 5 puntos a las edades comprendidas entre los 55 y 59 años; 3 puntos para los de entre 45 y 54 años; 2,5 puntos para los aspirantes con edad entre los 35 y 44 años;   2 puntos para los de 25 a 34 años; y 1,5 puntos para los menores de 25.

En lo que respecta al concepto de unidad familiar que computa a la hora de aspirar a entrar en la bolsa de trabajo de emergencia social, se incluirán dos conceptos para adaptarse a la situación real de muchas familias. Será por un lado, incluir a los hijos menores de 25 años que no tengan ingresos y vivan en el mismo domicilio del aspirante, ya que hasta ahora computaba solo los hijos hasta los 18 años, cuando tal y como está el mercado laboral, es complicado que a esa edad tengan independencia económica por lo que forman parte de la carga económica de la unidad familiar; y por otro, se incluye a los mayores ascendientes como miembro de la familia al margen de que este tenga una pensión pública. Se evita así circunstancias en las que un mayor convive en el domicilio familiar y por el ingreso de su pensión, impide a otro miembro de la familia aspirar a entrar en la bolsa de emergencia.

La futura nueva ordenanza para regular el acceso a las bolsas de empleo incluirá otra novedad, la de la puntuación en la baremación si se es víctima de violencia de género con 10 puntos, -como ya se viene recogiendo en la normativa general del Estado-. Esta condición debe venir avalada por varios criterios, bien una sentencia, una orden de alejamiento, un informe de los servicios municipales que atestigüe la situación, etc. Es una forma de ayudar a personas que estén padeciendo estas circunstancias  o que la hayan padecido para que puedan acceder a esta bolsa laboral.

Por último, se ha incluido la no obligación de estar desempleado para solicitar el acceso a la bolsa de emergencia social porque en el día a día de este tipo de procedimientos desde el proceso selectivo se han percatado que muchas veces se ha visto excluida una persona que había trabajado justo el mes anterior a abrirse la bolsa aunque se hubiera llevado todo el año desempleada. Lo que se hará con la nueva ordenanza será pedir al SAE (Servicio Andaluz de Empleo) un certificado del tiempo inscrito como demandante de empleo en los dos últimos años y de esta forma baremar con una mayor visión la situación del aspirante en función del tiempo que haya estado desempleado. Así se le da la oportunidad a personas  paradas de larga duración y que por casualidad hayan trabajado unos días en el último momento antes de abrir la bolsa, no se vean perjudicadas.

Estos cambios entrarán en vigor una vez se aprueben en el pleno de este miércoles, 20 de septiembre, pasen el periodo de exposición pública de 30 días y el proceso correspondiente; se estima que  pueda ser en un plazo de un par de meses. De hecho, el compromiso  del gobierno local es sacar la próxima bolsa de empleo de emergencia social en base a estos nuevos criterios modificados para seleccionar al personal que ocupe plazas en la administración local y empresas públicas.

Para cualquier consulta, se puede acudir al área de Fomento y Empleo del Ayuntamiento de Rota.