La decisión de organizar un festival como el que hoy está teniendo lugar en el entorno de Punta Candor, tras el estadio municipal Antonio Pazos Puyana "Monago", ha atraído a cientos de jóvenes dispuestos a disfrutar de doce horas de música ininterrumpidas, pero esa diversión está generando malestar en los vecinos de la zona que han decidido unirse a la protesta de Verdes Equo Rota, para dejar claro que están a favor de la música, pero no que eventos de este tipo degraden el medio ambiente. 

Por eso, ni cortos ni perezosos, se han plantado con pancarta en mano primero en el entorno y luego en la entrada principal del recinto acotado por el que pasarán más de 40 artistas nacionales e internacionales en el ámbito de la música electrónica. El lema ha sido un año más "Música sí, pero no aquí", como ya han alzado la voz en otros festivales similares, y han intentado visibilizar su punto de vista dejando claro que no están en contra de este tipo de festivales ni de que los jóvenes encuentren alternativas de ocio, con lo que no comulgan como ha indicado desde Verdes Equo Abraham López Morales, es con que vuelva a ser un castigo para Punta Candor que unos pocos se diviertan.  En su día ya pidieron al Ayuntamiento de Rota que buscara nuevas localizaciones para este tipo de conciertos, pero se repite el esquema de años anteriores en una zona que  insisten en que debe protegerse todo el año, no impulsando campañas de protección unos meses y llevando a cabo autorizaciones a festivales en verano que acabarán cargándoselo a su juicio.

Los vecinos protestan no por la música, sino por cómo quedará el entorno

Aguantar que la música suene de siete de la tarde a siete de la mañana les crea inconvenientes a los vecinos en su derecho al descanso, pero entienden que es un día y que pueden soportarlo, lo que no quieren dejar pasar por alto es la degradación que aseguran que va a sufrir el paraje natural de Punta Candor, la zona de dunas y todo su entorno porque son cientos de jóvenes "pisoteando" espacios protegidos, lamentan, que luego alguien tendrá que limpiar o acabará pasando factura.

Dado que las actuaciones comenzaban a las siete de la tarde, desde horas antes ya se ha podido ver movimiento por el entorno del recinto acotado, las avenidas Almudena Grandes, Joaquín Sabina, parcelas habilitadas para parking y lamentan que ya había botellas y muchos residuos esparcidos, pero lo peor, han denunciado a este medio, es que sobre las 21.00 horas, cuando aún queda mucha noche por delante, ya han visto a personas orinar y defecar no solo en las dunas, sino en las zonas de entradas o laterales de las urbanizaciones con el malestar que eso está creando en los vecinos que ya saben que será una noche larga.

Algunos de ellos insisten en que no ven mal que se celebre un festival, y  aunque acabe a altas horas de la noche, lo aguantarán, pero temen cómo amanecerá el sitio.

En la concentración de vecinos que ha habido sobre las siete de la tarde, junto a Verdes Equo Rota, se han cruzado algunas palabras entre los que se sienten afectados por este evento y los que van a disfrutar de él, aunque no ha llegado a más.

Hay un dispositivo de seguridad desplegado por Policía Nacional y Policía Local que estará velando toda la noche por el buen desarrollo de este festival que ha atraído a numeroso público para desazón de quienes tienen sus viviendas a tan solo unos metros no solo de donde suena la música, que para ellos es lo de menos, sino de donde se están aparcando coches con maleteros abiertos con altavoces a gran potencia, botellas rotas esparcidas, bolsas y actitudes que aseguran que ya han pasado a ser incívicas. Son estas las que les molestan y denuncian deseando que cuando acabe el festival a las siete de la mañana, la zona de Punta Candor no haya quedado resentida.