La solicitud no es nueva y ya la han presentado en varias ocasiones, pero en vista del poco éxito, el grupo La  Plazoleta-Ecologistas en Acción ha vuelto a pedir al Ayuntamiento de Rota y en especial a la delegación de Salud Pública y Policía Local, que actúen en la regulación y control de las colonias de gatos ferales (silvestres) que existen en varias zonas de la localidad, pero sobre todo, en el sector SUNP RI1.

Hasta once colonias están reconocidas según el colectivo por algunas asociaciones, pero ellos apuntan a que hay muchas más, algunas incluso gestionadas por personas a las que ponen en evidencia por incumplir la normativa vigente, y además, depositar los restos de residuos en parcelas privadas y públicas.

La principal preocupación radica en que muchas de esas colonias de gatos están localizadas en una zona en la que se ha fijado por parte del Ayuntamiento como reserva especial del camaleón donde los ecologistas temen que pueda terminar la población de este parque que aún no ha sido inaugurado. La presencia de gatos, según apuntan, se extiende a la zona litoral, pinares, dunas y la franja costera y está ocasionando "un enorme daño a la biodiversidad de estas zonas costeras viéndose afectada la fauna silvestre entre la que estaría el camaleón, el lagarto ocelado, la lagartija colirroja, etc., y muchas aves silvestres, algunas protegidas, como el chorlitejo patinegro, muy vinculada al Monumento Natural de los Corrales de Rota.

Ecologistas en Acción entiende y comparte la sensibilidad y empeño de estas personas que se preocupan por el bienestar de los gatos ferales, pero señalan que no puede ser a cualquier precio asegurando que están deteriorando equipamientos públicos y en algunas zonas se les proporciona todo tipo de comida que atraen a roedores, "en definitiva, producen un daño colateral irreparable a la fauna silvestre, amparados por la poca visibilidad que suelen tener en las horas de caza".

Por todo ello, vuelven a solicitar que se realice un inventario de estas colonias de gatos ferales y que se retiren los ejemplares de la zona litoral y SUNP afectados, ya que indican con preocupación que están asentados incluso en el Monte Público Dunas de Rota. Ecologistas actúen con más contundencia en el cumplimiento de las normativas existentes.