Durante el pasado fin de semana, una de las vallas que protege la puesta de huevos y reproducción del chorlitejo patinegro en Rota en la zona de las dunas, ha vuelto a aparecer rota. Pese a que esa misma alambrada colocada por Costas a instancias de los ecologistas, se reparó recientemente, el trabajo no ha servido de nada porque a los pocos días, la mano del ser humano ha vuelto a invalidar su uso de protección.

Los ecologistas la han hallado de nuevo abierta en un tramo para permitir el paso andando por la duna a esa zona de playa, por lo que de nuevo, las puestas de chorlitejo patinegro que pudieran encontrarse en el entorno, vuelven a estar desprotegidas. Aunque la valla, situada cerca de Los Corrales, se reparó en el momento, los ecologistas están casi seguros de que han vuelto a romperlas.

La poca conciencia medioambiental hace que haya personas que no tienen reparos en saltarse la indicación, ya no  solo haciendo caso omiso a la cartelería que indica que es una zona sensible por la nidificación de aves y no se puede pasar, sino que encima, parten la valla para pasar tranquilamente pisando la duna, cuando a pocos metros cuentan con accesos habilitados.

Ecologistas en Acción ha recordado a través de este medio, que la reiteración y la intencionalidad aumentan considerablemente las sanciones si estas personas son pilladas llevando a cabo este acto, y que la infracción puede llegar a considerarse delito penal ya que el chorlitejo patinegro es un ave catalogada como vulnerable y casi en peligro de extinción.

El llamamiento a la responsabilidad parece seguir siendo inútil en algunos casos, pero los ecologistas no cesan, volverán a reparar las vallas, a estar pendientes e intentar que algunos de los huevos del chorlitejo patinegro puedan culminar con éxito su proceso de reproducción en estos meses que son claves.