La Plataforma contra las Antenas Nocivas de Rota, que se creó en diciembre 2015 en la localidad, preocupada por el alto índice de radicación que asegura que tiene el municipio con más de 124 antenas localizadas, ha vuelto a salir hoy a la opinión pública para alertar a la población de este problema.

Lo ha hecho Ángeles Niño González, coordinadora y administradora de la plataforma,  junto a Joan Carles López Sancho, experto en geobiología, especialista en radiaciones del hábitat, técnico en mediciones y  descontaminación electromagnética. Ambos han vuelto a poner el foco en la cantidad de casos de cáncer, ictus, fibromialgia, infartos o alteraciones del sueño que se da en personas que están cerca de una antena de telecomunicaciones y de las que, decía la coordinadora de la plataforma, tienen constancia. Como ejemplo, Ángeles Niño ha indicado que la plataforma por su cuenta llevó a cabo estudios en los entornos en los que hay algunas antenas llamativas como las tres situadas en un edificio cerca de la rotonda de María Auxiliadora en cuyas inmediaciones aseguran que hay numerosos casos de enfermedades provocadas por las radiaciones; estudiaron también la zona de la barriada de El Molino, la calle Carlos Cano (antigua Crucero Baleares) donde indican que igualmente tienen testimonios de afectados, o la antena frente al colegio San José de Calasanz, donde la plataforma apunta un dato llamativo en el que vinculan la muerte de ocho niños con cáncer, una profesora y una administrativa afectadas, con la exposición permanente a la radiación electromagnética de la antena. 

Son datos que a este colectivo le preocupa y por ello, han vuelto a pedir al Ayuntamiento de Rota que encargue un estudio para conocer el índice de radiación que existe en la localidad, en la que creen que 124 antenas para una población de 30.000 habitantes es excesiva. El único estudio radioeléctrico que se llevó a cabo, precisamente, como propuesta de unos presupuestos participativos en los que esta Plataforma de Afectados de las Radicaciones Electromagnéticas de Antenas de Telefonía Móvil estuvo muy presente, se presentó en marzo de 2022 por parte del Ayuntamiento de Rota, que lo encargó a una empresa externa (Eurocontrol S.A.), y derivó en que "no se había detectado riesgo para la salud" y que en Rota "todos los niveles de emisión son aceptables y entran dentro de la normativa vigente, por lo que no hay ninguna cuestión que ponga en riesgo la salud de la ciudadanía".

Sin embargo, para la  plataforma contra las antenas, el resultado no es fiable. Lamentan que no se contara con este colectivo para estar pendiente de cómo se hacían las mediciones y el estudio por zonas. Para ellos es fundamental medir el impacto de las antenas que están cercanas a colegios, escuelas infantiles y grandes núcleos de población, por eso, piden de nuevo que se repita máxime, con la llegada del 5G que, como decía Joan Carles López esta mañana, multiplicará el nivel de radiación.

Este experto en geobiología, director de la Federación Ambientalista Internacional en España, especialista en radiaciones del hábitat, técnico en mediciones y descontaminación electromagnética con una constante renovación, actualmente investigando y clasificando los tóxicos directos en la vivienda y sus alternativas, así como  el testaje personal por diferentes medios de las anomalías producidas por las radiaciones ambientales y tóxicas, pone en alerta a los ciudadanos.

La llegada del 5G es un riesgo que aumentará las radiaciones, indica. Con unas navidades a la vuelta de la esquina, augura que la cantidad de aparatos inalámbricos que se adquirirán sobrepasarán los límites, móviles potentes que emiten más radiaciones que una antena,  y eso conllevará a una permanente exposición a la radiación electromagnética que, a su juicio, tiene serios riesgos para la salud.
 

Hábitos normales como el uso de auriculares inalámbricos, llevar el móvil en el bolsillo, dormir con él en la mesita de noche, es más nocivo de lo que los ciudadanos saben, dice este experto que pide que, como se está haciendo en otros países de Europa, se debería de trabajar en la prevención con una serie de hábitos y tips para que el ciudadano se exponga lo menos posible a las radiaciones electromagnéticas. Usar auricular de cable, convertir el teléfono móvil en casa como un fijo a través de cable evitando el uso continuado de wifi, usar el manos libres o apostar por la fibra óptica plástica para  llegar internet a todas las habitaciones de la casa  por la línea eléctrica en vez de varios rúters para el wifi, son sencillos pasos para esa prevención que en países como Chipre, ya se está trabajando según asegura Joan Carles López.

En sus declaraciones a los medios cuando esta mañana ha visitado Rota, asume que las nuevas tecnologías están en el día a día y a todos gusta utilizarlas, pero habría que hacerlo, a su juicio, con el conocimiento en prevención necesario que de momento, las administraciones no están por la labor de impulsar.

Pasos sencillos como que una antena de telefonía móvil pueda ser compartida por varias empresas evitando que en un mismo edificio haya hasta tres diferentes, ya sería un buen límite, pero entiende que el negocio está por encima de la salud, y la normativa así lo permite. 

En consonancia con lo que promueve esta Plataforma contra las Antenas Nocivas, asegura que quien vive cerca de una antena de telefonía base, tiene efectos en la salud, y se basa en al menos 140 estudios sobre las consecuencias del wifi que así lo certifican. A su juicio, lo que ocurre, es que al negocio de las telecomunicaciones no le interesan estos datos y los pocos recursos con los que cuentan plataformas o empresas, no son suficientes para poder llevar a cabo esa auditoría real sobre cómo afectan estas radiaciones en el entorno más cercano a la población.

Joan Carles López  ha concluido que, actualmente, la normativa está hecha para que las empresas trabajen  y no para prevenir o cuidar al ciudadano, de modo que, mientras la normativa sea tan permisiva, poco hay que hacer. Desde la plataforma  insisten en la necesidad de un estudio epidemiológico que dejaría al descubierto la base de su preocupación por la salud de la población.

Ángeles Niño ha insistido por tanto en esa petición al Ayuntamiento de Rota para que se realice un nuevo estudio y que se haga por zonas. Ellos aseguran tener un recuento de personas afectadas por enfermedades que vinculan directamente a la exposición permanente a la radiación electromagnética.