Las primeras lluvias de este otoño, que en Rota han dejado algunas calles anegadas, han puesto también en alerta a grupos ecologistas que han mostrado su preocupación por una "sospechosa" mancha que ha aparecido en el mar a la altura del aliviadero de la calle Écija que se eliminó con una de las obras de mayor envergadura y más costosas (2,5 millones de euros) que se han hecho en los últimos años, precisamente, para acabar con el problema medioambiental que se generaba cada vez que había precipitaciones.

Aunque este medio no ha podido confirmar que esa mancha en el mar tenga que ver con los vertidos que antes salían por el aliviadero que estaba en la arena, junto al paseo marítimo a la altura de calle Écija, los ecologistas aseguran que sí, como ya venían advirtiendo al igual que otros grupos como Verdes Equo Rota. Y es que ninguno de ellos estuvo nunca conforme con la obra del aliviadero por entender que ese emisario submarino que se ha colocado desde la calle Écija  hasta unos 200 metros mar adentro, en realidad lo que iba a hacer era trasladar la "mierda" al fondo del mar en vez de verla salir por la arena hacia la costa como ocurría antes de la obra.

Hay que recordar que desde el gobierno local se apostó por esta  obra como la mejor solución a un problema  medioambiental que nadie podía negar.

El proyecto, terminado en abril de 2022, cuya eficacia se pone en entredicho con estas primeras lluvias, consistió en la construcción de una arqueta principal de desbaste en el final de la calle Écija para permitir retener toda la parte sólida en suspensión en las conducciones de saneamiento. Luego se procedió a la canalización de un tubo de polietileno en la zona de arena, unido a un tubo de conducción de grandes dimensiones que está en la zona de agua a 200 metros de la orilla desde la línea de marea baja. Es este tubo de 1,8 metros de diámetro el que se ha convertido en emisario submarino para canalizar las aguas que llegan al aliviadero de la calle Écija, pero según explicaba en su día el gobierno local, previamente se supone que han sido tratadas gracias a la arqueta de desbaste construida para retener  los elementos sólidos.

La realidad es que hoy, con las lluvias caídas, ha aparecido la mancha que se puede ver en las imágenes tomadas desde uno de los edificios altos de la zona de Virgen del Mar, que permiten apreciar perfectamente su aparición. A mediodía parecía que la mancha había comenzado a diluirse pero en la calle Écija persistía un fuerte olor a tubería que recordaba a tiempos no muy lejanos previos a la obra. Eso sí, no había rastro del aliviadero expulsando a borbotones agua sucia a la costa a la vista de todos. La cuestión es poder explicar la aparición de esa "sospechosa" mancha.

La suciedad vuelve al paseo marítimo de la Costilla

Lo que ha dejado también estas primeras lluvias, como suele ser habitual, es una imagen poco agradable para un municipio turístico como Rota. Y es que esta mañana volvía una estampa que desgraciadamente se repite en el paseo marítimo de la Costilla desde hace años, cada vez que llueve con algo más de intensidad. 

Una lámina negra de agua sucia proveniente de un salidero  que ha rebosado en la Costilla ha ensuciado un buen tramo del paseo marítimo que ha lucido como en la fotografía.

Los operarios municipales se han afanado en limpiar la zona pronto, para dejarla en buen estado para el paso de usuarios.