La liquidación del presupuesto municipal del ejercicio 2021, de la que se dará cuenta en el próximo pleno del jueves 27 de octubre, ha arrojado unos buenos números para la economía del Ayuntamiento de Rota. Así lo indicaba esta mañana el delegado de Hacienda, Daniel Manrique, que si bien no ha tildado la situación de idílica ni mucho menos, sí ha constatado que el Consistorio ha conseguido revertir no solo todos los signos negativos que arrojó la liquidación de 2020, sino que ha conseguido un hito histórico. Y es que por primera vez en diez años, el Ayuntamiento de Rota tiene un nivel de endeudamiento por debajo del mínimo de 75% que marca el Gobierno. Es más, es la primera vez que consigue un 58,24%, alejándose así de la zona de riesgo financiero en la que se encontraba entre 2012 y 2015.

Daniel Manrique de Lara, que ha detallado de forma pormenorizada las distintas magnitudes que se tienen en cuenta para llevar a cabo la liquidación de un presupuesto, ha destacado que la gestión económica que se ha llevado a cabo desde que en 2015 entrara el PSOE a gobernar en el Ayuntamiento de Rota, ha permitido no solo reducir la deuda global, también la financiera y en este último ejercicio, hasta el periodo medio de pago a proveedores que ha pasado de 212 a 122 días.

El delegado ha comenzado informando del presupuesto de ingresos, con unos derechos reconocidos que en 2021 han ascendido a los 46.265.804 euros, lo que supone 5,5 millones más que en 2020 (40.752.827 euros). Además de este positivo aumento del 13,53%, el Consistorio ha cumplido el 97,98 % de las previsiones del presupuesto, algo que revela que “el presupuesto elaborado por este equipo de gobierno era real y no inflado como decían otros partidos”.

Por otro lado, el presupuesto de gastos de obligaciones reconocidas netas ha sido de 45.169.820 eros, lo que supone 2,9 millones más, debido a un mayor impulso de las inversiones paralizadas en 2020.

Daniel Manrique también ha valorado positivamente la evolución del grado de recaudación, que ha llegado al 87% de lo liquidado; un porcentaje muy similar al que presentan los pagos líquidos de las obligaciones reconocidas, ya que a 31 de diciembre de 2021, se había pagado el 80% del total de las obligaciones contraídas.

Son solo algunos datos que  vienen sustentados en una liquidación que se ha saldado con un superávit de 1.046.996 euros, un dato importante, decía el delegado de Hacienda, no solo por la cantidad que deja claro que se ha ingresado más de lo que se ha gastado "y no era un presupuesto inflado" sino porque hay que tener en cuenta que 2021 fue un año en el que todavía coleaban restricciones por la pandemia y la evolución económica no fue la normal. Pero es que además, se venía de una liquidación de 2020 que resultó negativa en 1,7 millones de euros.

Quiere decir, según explicaba Daniel Manrique, que no solo se han mejorado los datos con respecto al año pasado, sino que a excepción de 2020 por el Covid-19, se mantiene la tónica del gobierno socialista que, insistía, no significa que el Ayuntamiento tenga ese 1.046.996 euros de superávit para gastar, sino que  se utilizará para seguir amortizando la deuda financiera. En cualquier caso, el concejal se mostraba contento por cumplir con la estabilidad presupuestaria exigida, además de cumplir con la regla del gasto y no superar el 3% marcado por el Gobierno de la nación para los ayuntamientos.

Los datos de esta liquidación son también positivos en otras magnitudes, como la del remanente de tesorería que sale con un saldo positivo de 24 millones de euros, es decir, que si el Ayuntamiento vendiera lo que tiene y pagara lo que debe, le quedaría esa cantidad. En este apartado está el único punto negativo que según el delegado de Hacienda tiene esta liquidación y que tiene que ver con el elevado exceso del fondo económico de subvenciones y venta de patrimonio. Concretamente,  en el apartado dedicado a las inversiones, donde consta que debería haber 11,5 millones de euros para invertir,  no los hay. En realidad, no es que se deba ese dinero a nadie, sino que es una cantidad que hay que invertir y que poco a poco el gobierno local está intentando reunir para que este parámetro quede en unos años con saldo positivo.

Según Daniel Manrique el gobierno local va a establecer medidas para ir reduciendo este dato  que es el único, insiste, que ha salido negativo en esta liquidación. Entre estas medidas, se están depurando las obligaciones para ver qué obligaciones pendientes están pagadas o prescritas; se está dando salida a los excesos de financiación afectada donde hay un acumulado de 11 millones; así como a través del plan de pago a proveedores, y es que aunque hasta que no se haga la liquidación de 2022 no se sabrá el impacto definitivo, ya está arrojando datos significativos, puesto que el 2021 se terminó con un periodo medio de pago a proveedores de 212 días, y ya en este trimestre el dato ha bajado a 122 días, casi a la mitad.

Pero sin duda, al dato que más relevancia ha dado ha sido el nivel de endeudamiento actual del Ayuntamiento y que permite la sostenibilidad financiera. Hay que tener en cuenta que el Gobierno marca que si se está por encima del 110% de deuda financiera, el ayuntamiento de turno estaría en riesgo financiero,  si supera el 75% tendría que tener una tutela para la petición de préstamos, y si la deuda financiera está por debajo del 75%, ese ayuntamiento  está saneado. En 2021, por primera vez, el de Rota está en la mejor de las posiciones de deuda financiera que ha conocido en los últimos tiempos muy alejado del riesgo financiero donde ha estado otros ejercicios. Para muestra, Daniel Manrique ha indicado que mientras que en 2012, la deuda estaba en un 121,65%, en alto riesgo; en 2013 era de 127,99%, en 2014 de 124,88%, en 2015 de 121,39%, en 2016 era de 106,50%, en 2017 un nivel de deuda financiera del 88,66%, iniciándose así una bajada progresiva que terminaría con el 86,63% conseguido en 2018, el 75,69% de 2019, el 76,20% de 2020 y el 58,24% del último ejercicio liquidado. Es decir,  que el nivel de endeudamiento del Ayuntamiento de Rota ha bajado exponencialmente en los dos mandatos socialistas y por primera vez no solo se está por debajo del 75% marcado por el Gobierno de la nación, sino que se está muy alejado indicando la buena evolución económica conseguida estos años.

Por otro lado, también es un dato positivo que la deuda viva, la que se mantiene con las entidades financieras a largo plazo es a fecha de 31 de diciembre de 2021  de 18.135.740 euros, habiéndose reducido en 24 millones con respecto a 2020 cuando había una deuda financiera de 42.268.567 euros.

Daniel Manrique ha insistido en que la gestión económica que han llevado a cabo en estos años ha seguido una senda que ha permitido mejorar notablemente la economía municipal y como muestra, están los datos de esta liquidación del presupuesto de 2021. El delegado de Hacienda ha insistido en que los datos de 2020 fueron malos por la pandemia, cuya liquidación arrojó un déficit de 1,7 millones de euros y que pasado lo peor de aquella situación, sin que la evolución de la economía fuera del todo normal, han conseguido revertir todos los indicadores, a excepción del remanente negativo para gastos generales donde los 11,5 millones de euros que están en negativo no permiten hablar de la totalidad de todas las magnitudes que se tienen en cuenta en positivo. En cualquier caso, el delegado municipal ha indicado que se está trabajando en este parámetro y que, muy a pesar de lo que criticaba el PP, el presupuesto de 2021 ha demostrado el buen camino económico municipal, que se elaboró un presupuesto que era "serio", que no estaba inflado "porque sino, no tendríamos más ingresos que gastos", y que "estamos saliendo de la asfixia financiera" en la que estaban las arcas locales. De esta forma, indicaba, se deja "en evidencia" el argumento del PP.

De cara a los próximos años, el PSOE está convencido de que los datos mejorarán aún más, y que el ritmo de pago de deuda de 4 millones por año que han venido soportando mejorará en 2023 donde las cantidades serán menores porque la deuda también va reduciéndose.  Esta situación a corto plazo tendrá repercusión muy directa en el periodo de pago medio a proveedores que empezará a disminuir como ya está ocurriendo en este último trimestre, decía el delegado de Hacienda.