Una familia denuncia la falta de profesionales en "El Recreo" para atender a niños con necesidades educativas especiales
El niño afectado por la ausencia de atención es un menor de tres años que padece TEA (trastorno del espectro autista), quien se apuntó en el mes de agosto a “El Recreo”, la escuela de verano impulsada por la delegación de Igualdad para ayudar a las familias a conciliar vida laboral y familiar. Sin embargo, la experiencia para esta familia no ha sido del todo satisfactoria. Su hijo apenas estuvo una semana en este programa municipal, según relata a este medio y ha hecho público en un vídeo, porque el servicio municipal no tiene monitores especializados para la atención de estos pequeños que necesitan una atención especial. La denuncia pretende conseguir, simplemente, que el programa mejore y tenga en cuenta que cada vez son más las familias que tienen hijos diagnosticados con necesidades educativas especiales y por tanto, existe una necesidad de los afectados de que las administraciones tengan en cuenta esta circunstancia cuando plantean programas o escuelas de este tipo. Se trata de inclusión y normalización de situaciones que cada vez están más a la orden del día.
Virginia Gutiérrez es la madre del pequeño y no ha querido obviar su experiencia queriéndola hacer pública para que tome nota quien deba, en este caso, la delegación de Igualdad que es la que impulsa el programa "El Recreo".
Como ha contado a este medio, y aunque personalmente no le ha ocurrido a ella, hay niños que se han encontrado con la negativa de las monitoras para que el menor pudiera salir para sus sesiones de atención temprana, algo que durante el curso escolar está más que normalizado y de hecho, tienen derecho a salir a estas clases. Sin embargo, al parecer, por falta de personal para poder abrir y cerrar la puerta más allá del horario de entrada y salida, hay niños a los que no se les ha permitido la salida. Es una muestra de la falta de personal desde su experiencia. La denuncia, insiste, tiene como objetivo poner el foco en la necesidad de mejora en la atención de niños con necesidades educativas especiales que en verano se agrava porque son pocos los programas que cuentan con profesionales especializados.
En este caso concreto, la madre del pequeño afectado se puso en contacto con la delegación de Igualdad para trasmitir su preocupación acerca de las necesidades de su hijo, y cuenta que desde la delegación le transmitieron un mensaje de tranquilidad. Sin embargo, “no tenían conocimiento ni empatía ninguna. Pero, sobre todo, desconocimiento de las discapacidades de este tipo”, ha indicado la denunciante.
Hay que señalar que tras la pandemia, este verano la delegación de Igualdad volvió a impulsar la escuela de verano “El Recreo”, que abrió sus puertas en julio. “El Recreo” es un espacio con actividades lúdicas, culturales y deportivas para niños de 3 a 12 años en julio, y que durante el mes de agosto también acoge a menores de tres años. Como la propia delegada, Luisa Fernández, indicó en un balance inicial, este programa de conciliación laboral y familiar ha sido en julio todo un éxito, con un balance positivo, puesto que congregó casi a 400 niños, con un coste mensual, el de prácticamente el 95% de las familias participantes, por mes e hijo de 40,36 euros. 17 monitoras y coordinadoras son las encargadas de llevar adelante las actividades que se están desarrollando en esta escuela de verano.
Esta madre, por tanto, vio que para el mes de agosto, (ya que el servicio de escuela infantil de su hijo acababa el 31 de julio) esta podría ser una buena opción para que el menor estuviera atendido mientras los dos padres trabajaban. Por eso, volvió a contactar con la delegación de Igualdad, desde la que le afirmaron que habían solicitado más personal para agosto, pero ante las dificultades burocráticas no sería posible. Aún así, tranquilizaron a la madre, según explica la denunciante, indicándole que en agosto la ratio bajaría y, por lo tanto, la atención a su hijo podría ser más personalizada por los profesionales. Virginia, acostumbrada a luchar contra muchas vicisitudes por la situación de su hijo, reconoce que sabía dónde apuntaba a su hijo. "Mis hijos van a una escuela de verano. Yo lo único que quiero es que estén bien atendidos”, expone la madre del pequeño que considera que en ciertas actividades hay una discriminación hacia el menor, especialmente, por esa falta de personal suficiente que pudiera garantizar una atención del pequeño. Virginia relata que “si los niños por la discapacidad que tengan no pueden ir solos a las excursiones o necesitan de alguien, la solución que les dan es que vayan los padres", una opción que no tiene ningún sentido si, precisamente, esos niños acuden a escuelas o programas de este tipo porque sus progenitores están trabajando. La decisión por tanto, para los mayores de 3 años con necesidades educativas especiales, es que el pequeño se quede en la escuela mientras el resto de niños sale de excursión algo que los padres ven injusto. Aunque Virginia no ha pasado por esta situación con su hijo, dado que tiene 3 años y estos no realizan estas actividades en el exterior, es una situación que expone para que se tenga en cuenta que todos los niños deberían tener el mismo derecho que cualquier otro para disfrutar de esas propuestas lúdicas.
La madre insiste en que el foco del problema está en la falta de planificación de la delegación de Igualdad, y no en las monitoras, porque se han visto desbordados de solicitudes y, sobre todo, de niños con necesidades especiales sin tener personal suficiente para atenderlos. Hablamos de inclusión y no discriminación, ha manifestado la madre de este menor que con la difusión pública de su caso quiere poner el foco en la necesidad de esas familias que ya lo tienen complicado en muchas ocasiones para integrar a sus hijos en actividades habituales, y que no encuentran respaldo en las administraciones públicas o delegaciones como la de Igualdad que deberían velar por esa inclusión que se pregona en la teoría pero de la que aún falta mucho por recorrer para que se vea en la práctica.
Rotaaldia.com ha contactado con el Ayuntamiento de Rota a través de la delegación de Igualdad para obtener la versión oficial acerca del asunto y confirman desde el gobierno municipal que están recabando información y trabajando en la mejoría de este tipo de situaciones. De momento, han indicado, no pueden ofrecer ningún dato concreto sobre este caso.


































Sara | Sábado, 27 de Agosto de 2022 a las 20:32:37 horas
Los que os dedicáis a decir tonterías del tipo con lo que pagan y demás… vuestra vida bien??? Vamos a ver, pagamos lo que tenemos que pagar, cumplimos con los requisitos que tenemos que cumplir y no sabes si para algunas familias puede suponer un gran esfuerzo… pero aún así… que ganas de desvirtuar un vídeo de unos padres pidiendo la mejora del servicio, de forma constructiva, sin faltar al respeto a nadie y contando su experiencia, que nadie la puede desmentir! Si hay falta de personal hay falta de personal! Si estos niños tienen unas necesidades especiales tendrán que cubrirse que para eso presentamos sus diagnósticos y si es así se dice y punto… unos tienen unas experiencias y otros otras y yo no sé cuestiona a ningún monitor… de verdad centrémonos… y a tu comentario… bastante tendrán tus padres los pobres en tener que apechugar contigo….
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