Durante mucho tiempo la regla ha sido un tabú, y aún en muchas culturas no se habla de ello en público e incluso puede suponer un motivo de vergüenza, lo que ha provocado que la información sea escasa y, en ocasiones, basada en creencias extendidas del boca a boca. De hecho, muchas mujeres y niñas han sido víctimas de leyendas urbanas y falsas historias sobre la regla.

Ahora ya lo sabemos y podemos confirmar que la menstruación no corta la mayonesa, ni impide bañarte en la playa o en la piscina con riesgo que se te corte, no agria el vino, no marchita las flores, no oxida el hierro, ni enloquece a los perros, y eso sí, si comes chocolate durante esos días, engorda igualmente.

Afortunadamente, con el paso del tiempo, hemos conseguido que los mitos y tabús que convertían a la menstruación en un episodio impuro y vergonzoso se hayan superado, aunque aún estamos lejos de su completa normalización y sufrimos una brecha de conocimiento entre el cuerpo femenino y el masculino.

Lo que es evidente es que la menstruación forma parte del cincuenta por ciento de los seres humanos, con más o menos dolor, y por lo habitual es un tema indeseado, pero que por simples causas biológicas está implícito en el cuerpo femenino. Aún así, cada mujer es diferente y no hay una única forma de menstruar, pudiendo provocar desde molestias ligeras hasta dolores intensos.

Hemos avanzado de tal forma que ya tenemos una ley contempla bajas laborales de tres días en períodos menstruales, pero tenemos que estar informados y reconocer que las molestias normales y los dolores incapacitantes no forman parte del mismo saco ni se debe generalizar, no se debe tachar como debilidad femenina, ni puede servir para estigmatizar a la mujer, no es argumento para concluir que son demasiado frágiles para trabajar. Por el contrario, y con fundamento, es una razón y un motivo fisiológico, con una certificación médica y facultativa de un dolor incapacitante y que interfiere en su actividad durante unos pocos días. Por tanto, no es un permiso para todas.

Teresa Menéndez)