Juan Montes
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LORCA Y ROTA UNIDOS EN UN BRAZO A TRAVÉS DEL CLUB HÍPICO "LAS LAGUNETAS"
Decía una frase de una sevillana de Ecos del Rocío “tengamos un detalle con la humanidad”.
La escuela municipal de equitación albergó el espectáculo ecuestre organizado por el club hípico "Las Lagunetas" con el deseo de alcanzar un aporte económico que ayude a paliar en parte las necesidades básicas de la familia de Francisco Laynez que sufrió el devastador terremoto en su villa de residencia como es la población murciana de Lorca. Una entidad joven que trabaja con la ilusión de crecer día a día en estos conceptos preparando a un nutrido grupo de jóvenes jinetes con el deseo de montar a caballo y conseguir con el mismo, el dominio total en todas sus facetas.
Al acto asistió el concejal delegado de Deportes y Agricultura, Francisco Corbeto Carrasco, colaborando en todo lo necesitado siempre en aras a la ayuda mencionada y preocupado en todo momento porque el evento saliera en perfectas condiciones.
Dicho espectáculo ecuestre estuvo divido en una serie de fases coordinadas haciendo del mismo un disfrute de amigos, familiares y simpatizantes de esta actividad deportiva. Hay que destacar la presencia de pasión flamenca de Laura Pirri donde sus jóvenes bailaoras aportaron con su trabajo tintes emotivos.
Rota es una población sensible, humana y trabajadora que aportará con su presencia y con su apoyo una ayuda económica sustancial para paliar con ello en parte, las necesidades más imperiosas de Francis y sus hijos.
Al mismo asistieron alrededor de 900 personas completando el aforo de las instalaciones ecuestres además de reseñar a un colectivo humano que aportaron con su trabajo en los aledaños del bar otra ayuda inestimable para la misma causa. El acto contó con una serie de actividades y números puntuales que nos hicieron disfrutar de lo lindo durante más de dos horas.
El Pase de Seis es un número de coordinación entre jinetes y caballos, realizando ejercicios de Doma Clásica como por ejemplo, espalda adentro, apoyos y alargamientos. Todo ello será en los tres aires: paso, trote y galope.
Paula del Campo, montando a "Enamorada", es la alumna más veterana del club hípico "Las Lagunetas". Lleva seis años montando. Destacar que "Enamorada" es una yegua de capa castaña morcilla, cruzada y fruto de la primera yegua que adquirió Manuel Piruat Aparicio, profesor del club hípico "Las Lagunetas". Nieves Niño, participó montando a "Caprichoso", de capa torda en fase blanca de raza anglo-hispana. Ángela Herrera, montó a "Bandolera", que es una yegua de su propiedad de capa castaña encendida y raza española. Pablo García, alumno de Sevilla, montando a "Isleña", yegua de su propiedad, de capa torda picaza y raza española. Paola Beltrán montando a "Princesa" de capa negra y raza española. Lorena Beltrán montando a "Jardinero", de capa torda y raza cruzada.
La iniciación a la hípica es una actividad donde participaron los tres alumnos más pequeños del club hípico "Las Lagunetas" que se presentaron para demostrarnos que no hay límite de edad. Ellos asimilan con suma facilidad los conceptos básicos que les enseñan sus profesores y con ello, su manera de montar a caballo adquiriendo un estilo propio a tan corta edad.
José Santos tiene tres años de edad y fue montado a lomos de "Isleño" de capa alazana y raza cruzada. Sofía Gutiérrez, también tiene tres años de edad y fue montada a lomos de "Princesa", una yegua de su propiedad, de capa negra. Pablo Guillén, tiene en la actualidad seis años de edad, y montó a lomos de "Rociera", la veterana del club hípico "Las Lagunetas".
En la Alta Escuela se aprecian ejercicios como espalda adentro, apoyo, alargamientos, piaffe (trote levantando mucho las patas sin avanzar), passaje (es un trote a cámara lenta), paso español (donde el caballo va andando levantado las manos), piruetas y cambios de pie entre otros. Ésta es una antigua disciplina ecuestre se cree que apareció a finales del siglo XVI y tiene origen militar teniendo su mayor esplendor en el picadero de Versalles.
En esta modalidad participó la señorita Estefanía Cabrera montando a lomos de "Enamorada". Consiste en realizar ejercicios naturales del caballo que éste hace en la manada pero con la particularidad que éstos se realizan bajo la orden del jinete. Riendas largas es una modalidad ecuestre que no puede faltar en un evento. Se disfrutó viendo este número. En la misma participó Paula del Campo Peña montada a lomos de "Luna". El número de riendas largas consta de ejercicios de Alta Escuela y de aires elevados realizados por un jinete/amazona pie a tierra sin ayudas de piernas ni asiento, realizando piaffe, passage, paso español, elevadas y otros ejercicios dignos de apreciar. La estética marca una pauta importante en esta clase de eventos ecuestres: sevillanas a caballo.
Otro de los números que le dio esplendor a esta noche veraniega fue el acompañamiento de un cuadro de flamenco donde participaba una bailaora y un jinete a caballo. El ejemplar equino llamado "Caracol IV" estuvo montado por la señorita Estefanía Cabrera y al baile tuvimos la participación de la joven Nieves Pirri. Dos bellas señoritas que con su manera de coordinar los movimientos nos llenaron de encanto andaluz. Es puro sentimiento de la baja Andalucía.
La escuela municipal de equitación participó con ocho de sus jóvenes alumnos en un carrusel que tuvo una duración cercana a los 10 minutos destacando su trabajo sobre el cuadrilongo acompañadas en todo momento por su preparadora, una mujer perseverante y entregada a su trabajo la cual disfruta de nuestra población desde hace más de una veintena de años. A su vez José Mora disfrutó del evento ayudando en todo lo posible para que el mismo destacara con letras de molde.
En la modalidad de doma clásica, el director de la escuela "Las Lagunetas" participó en una disciplina que consiste en el adiestramiento del caballo por medio del cual el jinete consigue que realice todas sus órdenes con un alto grado de armonía. Manuel Piruat Aparicio estuvo montado a lomos del ejemplar equino "Caracol IV", caballo de pura raza española de capa castaña morcilla, propiedad del jinete. La reprise consta de ejercicios tales como piaffe, passage, alargamientos, piruetas en piaffe y cambios de pie entre otros. Dentro del mundo de los caballos existen ciertas disciplinas que permiten mostrar a estos animales inmersos en un contexto que multiplica su belleza estética. Gracias a este equilibrio mostrado entre jinete y caballo somos capaces de admirar toda su nobleza.
Dominó a caballo. En esta modalidad, Paula Gutiérrez y María Lucero de 6 y 8 años, montaban a "Princesa" y "Jardinero" en un dominó a caballo realizando ejercicios de iniciación en dos pistas, como son espalda adentro, grupa adentro y cesión a la pierna... Aquí los caballos ejecutaron ejercicios de equitación avanzada al compás de la música clásica que les acompaña en cada una de las actividades que realizan sobre la pista.
Doma vaquera es una disciplina en la que el jinete con la rienda en una sola mano conduce al caballo por la pista al paso y al galope cambiando de ritmo y realizando giros y arreones. Aquí, el joven Álvaro Guillén montando a "Tacatún", que es una jaca anglo-árabe de capa castaña y colina de su propiedad, realizó los movimientos de trabajo en el campo. Entre ellos, cabe destacar las piruetas directas e inversas, paso atrás, medias vueltas, arreones, apoyos, círculos y paradas en raya por citar algunos. Esta modalidad es un disciplina de raíces españolas antiquísimas y consiste en que el caballo esté en un estado de equilibrio y dominio que permita emplearlo en las diversas situaciones del campo.
En trabajos a la mano, jinetes y amazonas pie a tierra crearon la impulsión necesaria para realizar ejercicios de aires elevados como por ejemplo la levada, la posada, la cabriola, la reverencia, etc. de Paula del Campo con "Macareno", Ainoa Izquierdo con "Luna", Cintia Moreno con "Canastero",
Marta Moreno con "Jardinero", Estefanía Cabrera con "Enamorada", Matilda Herrera con "Gitano" y Nieves Niño con "Lanjarón".
El acto tuvo un final como broche de oro con la presencia de Manuel Piruat con su caballo "Gitano" realizando sobre el rectángulo cuadrilongo trabajo en libertad con la presencia junto a él de la excelente bailora flamenca Laura Pirri que con su espontaneidad hicieron del respetable un número de alta escuela. Todo por Francis y su familia.
Rota una vez más fue sensible con sus gentes. Gracias a todos los que hicieron posible esta singladura ecuestre consiguiendo con ello mejorar las necesidades básicas de esta humilde familia. Gracias a los padres, gracias Manuel y gracias a Lucy, sin ellos no hubiera sido posible convertir este sueño en realidad.
Mondel












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