Ecologistas en Acción de Rota ha dado a conocer las alegaciones que como colectivo presentó a la entidad responsable de las autorizaciones para la instalación del Parque Eólico Marino Puerto de Cádiz, basadas en argumentos medioambientales.

Desde este grupo manifiestan que no se oponen a la instalación de un parque eólico marino como fuente de energía renovable vital en la lucha contra el cambio climático, es más, la consideran imprescindible para avanzar en la descarbonización de la economía. Pero piden que esta planta de 18 aerogeneradores de casi 200 metros de alto, con una potencia eléctrica de 163,8 megavatios y una superficie de más de 11,4 kilómetros cuadrados (casi igual que el término municipal de Cádiz), se instale a una distancia no menor de diez kilómetros de la costa de Rota y lo más alejada posible  de la línea costera.

Desde Ecologistas recuerdan además que en la zona de implantación elegida concurren los puertos deportivos de Sanlúcar de Barrameda, Chipiona, Rota, El Puerto de Santa María, Puerto Real, San Fernando y Cádiz, así como la importante actividad de los cruceros que realizan escalas en el puerto de Cádiz, que se verían muy afectados por esta instalación, por eso, y porque es un proyecto que afecta al medio natural, es por lo que este colectivo se muestra en contra.

Para este colectivo genera una mayor preocupación, aparte del paisaje a nivel turístico como tal que se vería alterado, el impacto ambiental sobre la fauna ya que la ubicación de estos aerogeneradores entre el Parque Natural Bahía de Cádiz, que incluye una Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y una Zona de especial Conservación (ZEC), el Monumento Natural Los Corrales de Rota (ZEC), parques periurbanos, como los de Rota y El Puerto, son unas zonas de paso muy importante de aves migratorias entre el norte de África, el Estrecho de Gibraltar y Doñana, pudiendo verse afectadas gravemente por los impactos que las mismas podrían sufrir contra los aerogeneradores, ello multiplicado por dos; por ser las veces que se produce la migración.

Los ecologistas aseguran que existen decenas de especies de aves limícolas, marinas y hasta rapaces que se verían afectadas, con especial mención a la pardela balear (Puffinus mauretanicus), en riesgo de extinción.

En lo que respecta al fondo marino, en sus alegaciones llaman la atención sobre la gran incidencia que tendría el parque eólico marino, toda vez que la instalación proyectada es con monopilotes, en la flora y la fauna marina. Por ello, se solicita que se exija al promotor que aporte estudio de impacto ambiental exhaustivo que informe sobre las especies y la incidencia que pueda tener en la misma la instalación proyectada.

En cuanto a la línea de conexión a la red eléctrica de 15 kilómetros subterránea, consideran que se deben adoptar medidas de protección del suelo marino, así como de las especies que la habitan, dado el calentamiento que sufren los cables y por ello, el agua que se encuentra en contacto con los mismos, en cumplimiento del Real Decreto 1432/2008.

Un proyecto de estas características debe garantizar medidas que, ya no solo protejan la flora y fauna del entorno, sino que incluso las mejore, que puedan realizarse en los entornos costeros de la zona de ubicación, en Rota, Cádiz o El Puerto, para la debida protección de los sistemas dunares, playas, ríos, marismas y esteros.
Además, también consideran de importancia que se adopten medidas educativas y sociales, entre otras, que promuevan actividades sobre los entornos costeros (plantación de especies que protejan el cordón dunar, protección de aves limícolas, limpieza y protección de playas, actividades en esteros...); que deberían ser incluidas en el proyecto de ejecución  con el objeto de que sean adoptadas y llevadas a cabo por los agentes sociales o las administraciones.

Por último, para Ecologistas en Acción es importante tener en cuenta la existencia de  yacimientos arqueológicos existentes en la zona, por ello se propone que dada  la proliferación de pecios que ha dado a conocer la herramienta SIGNauta -entre otras herramientas-, sea tenido en cuenta en el proyecto, precisándose un mapa detallado, con informes técnicos de las posibles afectaciones a esos restos arqueológicos submarinos que puedan hallarse.

Desde el grupo ecologista se considera que instalar un parque eólico sin una planificación previa puede conllevar un rechazo social -al igual que sucede con otros proyectos eólicos y fotovoltaicos terrestres-. Por ello, dado que resulta evidente la necesidad de estas instalaciones a fin de descarbonizar la economía, apoyan la alternativa eólica, pero nunca sin una detallada planificación previa. En este caso, consideran que proyectos de este tipo deben vincularse con el territorio y la ciudadanía, que aporten beneficios económicos y/o puestos de trabajo y que exista una limitación, planificación y ordenación de estas iniciativas y se propicien las de titularidad comunitaria.

Junto a sus alegaciones recuerdan que ya Capitanía Marítima de Cádiz emitió, hace días, un informe absolutamente desfavorable y vinculante por razones de seguridad y operatividad del tráfico marítimo, respecto a la ubicación propuesta, por lo que confían en que finalmente no salga adelante.