Los pacientes de la doctora Grandes (por Daniel Peña Benítez)
Uno va al médico buscando una receta o una explicación ante aquel malestar que padece intentando encontrar en el facultativo de la salud una solución a través de la ciencia médica y sanar o paliar aquello que le debilita.
Pero qué ocurriría si ese doctor se encuentra tras la firma de una novela y a través de identidades falsas de sus personajes es capaz de combatir el hastío de la tristeza, el aburrimiento o incluso de la derrota descubriendo un mundo que alberga la alegría que es un arma bien poderosa muy superior al odio y debemos darle protagonismo.
Y para regar todo lo anterior mencionado es necesario atreverse a mojarse, a ser unos mismos porque las ideas dan sentido al ser, configuran un sentido crítico ante la vida y hacen florecer la opinión. Por consiguiente, para regar todo aquello es necesario convertirlo en prosa, en verso, en canción, en artículo, en definitiva en acción, y dicho poder esta relegado a unos pocos intrépidos que plasman lo que tienen dentro haciendo posible el milagro de la comunicación, tan espectacular y maravilloso que hace posible admirar a una persona sin conocerla.
Gracias Almudena Grandes por esa pluma atrevida y ese espíritu comprometido.
Daniel Peña Benítez

































Hermano Lobo | Domingo, 05 de Diciembre de 2021 a las 17:46:24 horas
Si hay más allá, que Dios la perdone. Que le perdone todo el odio que rezumaba contra los que no eran de su cuerda política.
No digo nada más, ¡ay la hemeroteca!
Saludos.
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