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Antonio Franco 5
Sábado, 25 de Septiembre de 2021

El laicismo de las fiestas

[Img #152170]En Cádiz capital no ha sentado nada bien el traslado del próximo Carnaval al mes de junio. Al menos no a todo el mundo. El traslado viene originado, claro está, por la presencia del corona virus que se ha instalado en nuestras vidas y que nadie puede asegurar que resurja con virulencia, según sus mutaciones, el próximo invierno.


Así que don Carnal sufrirá las calores de este rinconcito del planeta, algo que no ocurría desde que  este país nuestro estaba gobernado por los fascistas que ganaron la guerra civil. Los tentáculos del franquismo, alérgicos a todo lo que oliese a Libertad, erradicaron la esencia propia del Carnaval, que quedó convertido en “Fiestas Típicas Gaditanas”, por recomendación directa de la Iglesia de aquel tiempo. Por aquel entonces, don Carnal y doña Cuaresma no se llevaban demasiado bien. La enlutada contaba además con una vecina chivata, doña Censura, que le tenía al corriente de los desmanes del señor don Carnal. El primero representaba el pecado, mientras que la señora de negro era todo recato. Pero este es un tema que merece un capítulo aparte.


Bueno, todavía hay algún sector eclesiástico que ve esto del Carnaval como algo pecaminoso. Pero, lo que es el pueblo llano, pasa de la perversidad de las letrillas y del disfraz desenfadado a transformarse en ferviente nazareno en menos de cuarenta días.


Todas las fiestas laicas han sido trasladadas de fecha o simplemente suspendidas en este último pandémico año. Ha ocurrido con las Fallas de Valencia, con la Feria de Sevilla... y ahora, por decisión del gobierno local gaditano, también el Carnaval.


Exceptuando al Carnaval, todas las fiestas de este país nuestro tiene siempre un cierto contenido religioso. En las Fallas, por ejemplo, hay una ofrenda floral a la Patrona de Valencia, la Virgen de los desamparados. Los mozos en Pamplona en los sanfermines dirigen una plegaria al Patrón antes de cada carrera delante de los toros.


Cualquier celebración, ya sea deportiva y/o festiva, viene acompañada de una ofrenda religiosa. Si un club gana el campeonato, el equipo se dirige a ofrecer el trofeo al Patrón o la Patrona. O a los dos. Da igual que el equipo lo integre jugadores no creyentes o practicantes de otra religión cualquiera. La ofrenda forma parte de la historia del club y se ha instaurado como costumbre.


Todas las festividades giran en torno al hecho religioso. El Viernes Santo siempre cae en  la primera luna llena de la primavera. A partir de ahí se programan todas las festividades. Cuarenta días antes del primer plenilunio primaveral tiene lugar el Carnaval. Cincuenta días después de la Semana Santa el acontecimiento religioso es Pentecostés. Es tiempo de la Romería del Rocío. Y, en torno a esas fechas, las distintas ferias.
Aunque también es verdad que el contenido lúdico-festivo ha superado con diferencia a la idea primitiva de las celebraciones religiosas.


La Navidad, por ejemplo, se ha convertido para la mayoría en momentos de reencuentros familiares, comidas de empresas, hacer y recibir regalos...


Otra de las celebraciones que han perdido totalmente su sentido original es la del 28 de diciembre, el Día de los Santos Inocentes. Se ha pasado de rememorar la matanza de los inocentes por orden de Herodes para acabar con el Mesías que le pudiera hacer sombra en su reino de Judea, a un día en que cualquiera puede ser víctima de una broma.


Hasta en las celebraciones del Patrón o de la Patrona de cada localidad prima el hecho consumista por encima de la festividad religiosa en sí. Son días festivos aprovechados para disfrutar con los amigos y los familiares, y, si para más inri ese día se coloca estratégicamente para “construir un puente”, se puede aprovechar para darse una escapada fuera de la localidad.


En resumen, cultural y festivamente giramos en torno a la religión, aunque seamos agnósticos o ateos. Pero, eso sí, definitivamente Demócrito se ha impuesto a Heráclito.

 

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  • Juan

    Juan | Domingo, 26 de Septiembre de 2021 a las 22:55:14 horas

    ¡Por favor! ¡Qué cansado este tío! ¿Nunca va a cambiar el adoctrinamiento subliminal que inyecta como un virus (mira por dónde) en sus escritos?
    ¿Es que no se entera de que Franco (por cierto, ¿pariente de él?) murió hace ya “un siglo”? Y si quiere seguir dando la tabarra con el franquismo, el fascismo bajo la mentira de esta “memoria histórica”… ¿por qué no hace memoria de verdad y nos habla de las checas, de la quema de iglesias, del asesinato de tantos inocentes que no querían ser comunistas? No Franco, no, eso no es memoria histórica… eso demuestra una parcialidad que descalifica de plano lo que escribes.

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  • J.G.

    J.G. | Domingo, 26 de Septiembre de 2021 a las 12:29:37 horas

    Las fiestas acaban siempre con un barniz religioso. La navidad, en origen, no conmemora el nacimiento de Cristo, sino el solsticio de invierno; igual que San Juan coincide con el de verano. Las religiones y la religiosidad han teñido celebraciones que muchas veces no tenían nada de trascendente. Tener un patrón o una patrona, dicen algunos especialistas, antropólogos o sociólogos, indica una celebración de la propia tribu, que utiliza un totem, o un santo como representación. Así que más que perder el sentido originario religioso, lo que tenemos es la enésima transformación de las celebraciones. El pueblo habla.
    (Por cierto, la asamblea de Ceuta no "prefiere" las fiestas musulmanas, sino que "comparte". Si la mayoría de la población se divide entre cristianos y musulmanes, ¿no es lógico que haya fiestas en el calendario de una y de otra fe? ¿O es que pensamos que para ser esPañol hay que ser católico? ¿Cuántos años o generaciones tienen que pasar para que alguien sea esPañol sin cuestionársele por su religión?)

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  • Justino

    Justino "Tomasito" | Sábado, 25 de Septiembre de 2021 a las 19:31:44 horas

    Qué tendrán que ver los "demócritos" o los "heráclitos" con el respeto a las tradiciones culturales de cualquier país.Para no perder la costumbre en el libelo que pública en esta sección cada semana,al final del mismo y como moraleja de su pretendido adoctrinamiento....la vuelve a "cagar"!

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  • Rebelderota

    Rebelderota | Sábado, 25 de Septiembre de 2021 a las 19:12:06 horas

    Artículo infumable como casi siempre , esta vez nos saca como siempre el cuento del fascismo- Franquismo para mezclar religión con ello , Le recuerdo al Sr Franco la realidad de hoy en día que es lo que vivimos y es que solamente los regímenes comunistas son los alérgicos a todo lo que huele a Libertad , llenos de censuras y de pérdida de la libre opinión y pensamiento , y claro el Sr Franco y su partido IU apoyan a estos regímenes dictatoriales así que no nos cuente cuentos .
    Por mi parte estoy contento que haya fiestas religiosas aunque como se ven en Ceuta de mano del PP , prefieren las fiestas musulmanas , y eso si algo que parece que algunos idiocios políticos estan empeñados en meternos esta religión aunque no queramos.

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  • José Luis Pineda Acosta

    José Luis Pineda Acosta | Sábado, 25 de Septiembre de 2021 a las 13:29:20 horas

    Según la historia de las culturas mediterráneas,llevamos haciendo ofrendas a los santos o divinidades más de dos mil años antes de Cristo.
    Las cofradías ya existían,cada cual con su dios o diosa, algo parecido a lo que hacemos hoy,aunque todos sabemos que se venera al mismo Padre o Madre, pero cada cual prefiere la suya.
    gracias por el artículo siempre escribes cosas muy interesantes.

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