El Trío Cordilegio ofreció anoche un concierto enmarcado dentro de los martes clásicos del Verano Cultural de la localidad, que sigue compaginando diferentes corrientes artísticas para que locales y foráneos puedan disfrutar de un calendario muy variado, donde la música tiene su sitio asegurado en este mes de agosto.

El evento contó con una gran respuesta de público, donde decenas de personas respetaron en todo momento las medidas sanitarias frente al Covid, con la distancia de seguridad que imponían las sillas al aire libre en un marco como es el de plaza de la Merced.

Con el buen repertorio escogido para la ocasión, desde las 21.30 se fueron sucediendo todas las notas de los integrantes del Trío Cordilegio, una formación que tiene su origen en la propia familia de sus componentes, ya que está integrado por dos hermanos, Pablo y Francisco Linares Rodríguez, ambos estudiantes de violonchelo con una gran trayectoria en los estudios del grado profesional de música, y su padre, Francisco José Linares, profesor de guitarra clásica.

Las ganas de interpretar música juntos, y su pasión por este arte, fueron forjando la creación de esta formación musical, para la que han ido creando un repertorio variado y basado en todas las épocas y estilos que hicieron las delicias de los presentes.