Juan Montes
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ANTONIO PEÑA IZQUIERDO, XXXIII PREGONERO DEL ROCÍO DE ROTA
Eran las nueve y cuarto del día 3 de junio del presente año cuando se dio comienzo al XXXIII Pregón del Rocío en la Villa de Rota en la parroquia de Nuestra Señora del Carmen. El designado fue un conocido rociero, enamorado de la Virgen, todo un ejemplo de buen hacer y saber estar y como no, nos adentró en las entrañas del mundo rociero anegando corazones y citando paso a paso vivencias, momentos, paradas, rengues y un sin fin de anécdotas que nos hicieron disfrutar de todo lo que significa la peregrinación a la aldea de la Virgen del Rocío.
A penas sin darnos cuenta se nos ha echado encima la primavera anunciada en todos los rincones de Andalucía en unos tiempos medidores de la vida que pasan sobre nuestras cabezas como si fueran nubes pardas preñadas de agua, empujados por el viento que alguna lejana mariposa ha generado a través de la unión del Guadalquivir que nace en esta bendita tierra con el inmenso mar oceánico.
Allí, el limpio celaje primaveral que cobija los pueblos rocieros estrenan cada año con gozo los colores de sus Simpecados. La vieja tierra de Andalucía arriba y abajo se hará camino y por todas partes el sentir de los pueblos se convertirá en itinerante plegaria rociera que ya se prolonga como afluente cada vez más numerosa por toda la geografía española.
Solo Ella quiso que se adentrara en las vereas de Doñana hace ya algunas primaveras, un rociero ejemplar y por ende un rociero lleno de emotividad y entrega hacia los demás. Bien cierto es que las profesiones marcan una pauta de individualidad laboral en ciertas áreas de la sociedad, pero no es menos cierto que algunas de ellas se antojan vitales en el devenir de cada dia como es el mundo de la medicina. Esa síntesis de ilusión y esperanza, de amor a la Blanca Paloma, ha sido manifestada por nuestro pregonero desde que la Virgen le llamó al camino por esas vereas de la vida.
Con él salimos al campo, nos sentimos peregrinos, caminamos al soplo de la devoción secular a Santa María del Rocío que nos recuerda aquella estancia donde se hizo presente el espíritu del Resucitado. Allí se abren las puertas de nuestras vidas con el soplo del aire marismeño. Allí nos hace sentirnos peregrinos por vereas de Doñana y sendas que se abren al paso de los romeros .
Cada nuevo amanecer, Antonio con su manera de concebir el Rocío nos ayuda a profundizar más y mejor en todo lo que conlleva las relaciones humanas. Cada momento vivido en esa peregrinación anual al santuario del Rocío los configura como un rociero que de la mano de la madre de Jesús hace de su vida un camino que supone decisión y compromiso, sacrificio, superación constante y sentido de comunidad familiar compartiendo con todos lo que se es y lo que se tiene.
Todo un ejemplo de entrega y perseverancia, de amor hacia los demás .Ella y solo Ella quiso que como maná caído del cielo, arribara a las caminos rocieros cual falucho navegante, acompañado de su familia, su maletín repleto de complementos medicinales, de su ropaje y de su amor hacia los demás.
Quiero manifestar mi alegría por haberme elegido su presentador de esta nueva cita a las puertas de Pentecostés. La presentación de un roteño y amigo que nació fruto del matrimonio entre Antonio y Carmen con una infancia centrada en sus estudios de bachillerato, sus momentos musicales con la banda municipal de música Maestro Enrique Galán, sus estudios universitarios enmarcados en la medicina y sus tareas políticas durante varias legislaturas.
Tras obtener la titulación de doctor en medicina realiza un master de drogodependencia dedicando una etapa de su vida a la ayuda del colectivo mencionado. En la actualidad, ejerce como médico del SAS en la vecina localidad de Chipiona donde es reconocido por su trabajo y humanidad con sus pacientes. Fruto de su enlace nupcial con Merchi Naranjo, tiene tres hijos: Antonio, Pepe y Esau, auténtica familia unida derrochando amor entre sus componentes y con ello completando su felicidad manifiesta.
El mundo al servicio del ciudadano como edil del Ayuntamiento de la Villa de Rota y miembro del equipo de gobierno se produjo durante varias legislaturas siendo alcalde presidente Don Felipe Benítez Ruiz-Mateos, Don Lorenzo Sánchez Alonso y Doña María Eva Corrales Caballero.
Durante su dilatada trayectoria ha recibido muestras de afecto y cariño recibiendo el premio de Roteñista del año 1990, Escudo de Oro de la U.D. Roteña por su apoyo a la cantera y Calabaza de Oro por la peña C.D. Rota en el año 2003. Enmarcado en todo ello ha saboreado las mieles de la oratoria poética realizando los pregones de Nuestra Señora de Regla del Pinar y del Rocío en tierras malagueñas.
Su vinculación rociera, su integración por esos caminos de la vida, su amor hacia la Blanca Paloma y su entrega hacia los demás le han situado en el día de hoy como primer exponente de la oratoria poética dedicada a la santísima Virgen del Rocío.
En este Rocío, que es la explosión de júbilo y de fe de los días de romería, esa cuestión indefinible, grande, literaria y excelsa, que es la peregrinación, la más grande del mundo, llega en su momento cumbre en la madrugá del lunes de Pentecostés. El tiempo se detiene en la aldea, desde el puente del Ajolí a la laguna donde se refleja la ermita, recorriendo todas sus calles, la aldea contempla su historia. Sus calles se visten de sensaciones, de música, de rocieros, de siglos que cruzan la línea invisible de su tradición. Por las calles preñadas de arena, los jinetes a caballo, la devoción y los cantes por sevillanas confluyen en los días de la romería como el legado perpetuo que es patrimonio, no solo de los almonteños, sino de la humanidad. Los versos convertidos en plegarias rocieras evocan rincones que refulgen en primavera, que hablan de la Virgen, de la marisma, de Doñana, del salto de la reja o de la madrugá visitando a cada hermandad portando sus Simpecados. De su pasado y de su presente, del legado que plasmarán Romeros de la Puebla, Marismeños o Ecos del Rocío cantándole a la Señora sobre el lienzo donde reside la madre de Dios en su advocación de Rocío.
A través de la religiosidad de nuestro pueblo tenemos un acceso privilegiado a su idiosincrasia, a su memoria colectiva y a la sedimentación que constituye su identidad grupal. Esto explica que el pueblo rociero se reconozca en aquellas formas y expresiones que le evocan sus experiencias religiosas.
El pasado viernes su pregón estuvo acompañado de la sintonía musical de jóvenes con sus voces que se adentraron en los corazones de todos los rocieros que aman a la Virgen y a su divino Pastorcillo, Patricia Montes, Rosa González, Abelardo González y los chipioneros Jurado. Acompañados excelentemente a la guitarra por el roteño Pepote.
Desde el atril de la parroquia carmelitana han pregonado las glorias de Nuestra Señora del Rocío destacados oradores que han llenado de ecos marismeños el primaveral aire de la Villa de Rota, trasladándose a ese futuro cercano en el que todo un pueblo se pone en marcha para visitar a la Señora en su humilde morada. Entre ellos, estuvo Antonio Peña Izquierdo el cual con su magnífico trabajo elaborado supo llegar a los corazones de los rocieros y adentrarnos en cada rincón de Doñana, en la aldea o debajo de las andas que llevan en sus hombros la Virgen del Rocío.
Su pregón albergó entre sus páginas un contenido altamente mariano, rociero y muy roteño por cuantas vivencias y momentos fueron reseñados. Antonio llegó a lo mas hondo del corazón de cada rociero. Felicidades por su gran trabajo realizado antesala a la presentación que el sábado de RocÍo llevará a cabo la Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Rota ante la Hermandad Matriz de Almonte.
Mondel












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