Diario del año del coronavirus
Canto de odio a Twitter
Balsa Cirrito
Nunca he sido lo que se dice un forofo de las redes, y, de hecho, no he accedido a Twitter hasta hace cosa de una semana. A menudo escuchaba a mis hijos referirse a noticias megatremebundas, que cuando yo preguntaba de dónde salían, recibía como contestación: “De Twitter”. De resultas, decidí acceder al club.
Y la realidad, superó mis expectativas. Twitter probablemente sea el mayor metemierda que haya inventado la humanidad. Se ha dicho muchas veces que nos encontramos en una época de enfrentamientos, de radicalidad y de división. Pues bien, no me cabe duda de que el Twitter de las narices tiene parte de responsabilidad. En otras redes sociales, por lo menos, hay que dar la cara y, lógicamente, cada cual se corta un poco a la hora de ponerse borde. Pero Twitter no. Twitter permite el anonimato y la peña se tira al cuello de sus semejantes con una indiferencia que casi llega a emocionar. No mercy! O sea, sin piedad. Allí se puede decir lo que apetezca, de incógnito, y no hay que justificar nada, por lo que las mentiras son colosales. Cuanto más grandes las falsedades, los insultos y las burlas, mejor, porque es de eso de lo que se trata.
Twitter resulta muy peligroso. Es como un microondas gigante donde se nos hubiera ocurrido la estúpida idea de meter todo el papel de aluminio del mundo. Lógicamente, el mundo tiene que salir ardiendo. Por más que lo pienso, no le encuentro ninguna ventaja a ese lanzador de basura que es Twitter. El resto de las redes sociales, es cierto que también tienen sus partes oscuras, pero juraría que predominan las provechosas. En Twitter, sin embargo, prevalece lo reprobable, lo mezquino, lo perverso. ¿Quieren saber cuál es el tema fundamental de Twitter (lo digo para quienes lo la conozcan)? Pues el tema principal es el odio.
¿Digo con esto que se debería prohibir? Pues no... O mejor dicho, no lo sé. No estoy seguro de que prohibir tanta shit fuera en contra de la libertad de expresión. Porque yo diría que incluso la libertad de expresión tiene ciertos límites. Y no hablo de política, que también, sino de cuestiones más personales. Llevo poco tiempo en la red, pero todavía no he visto que nadie, cuando sale en la sección de destacados, sea para recibir elogios. Cualquier persona que aparezca en las garras de Twitter es despedazada por los colmillos de la jauría. Si esto es lo que nos divierte, de acuerdo, pero quizás lo próximo sea volver a los combates de gladiadores. Lo mismo corre menos sangre.
José Manuel | Lunes, 08 de Junio de 2020 a las 13:25:22 horas
Depende de lo que busques. Twitter es una gran herramienta si se usa de forma responsable. Otra cosa es como tú lo uses. Aprende a usarlo y después comentas.
Accede para votar (0) (0) Accede para responder