El primer día oficial del Carnaval roteño 2020 arrancaba el sábado por la noche con el homenaje que el Ayuntamiento de Rota hace cada año a carnavaleros que con su implicación ayudan a mantener viva esta fiesta y que son un referente. En esta ocasión, Rafael Chacón Pozo y el AMPA del colegio Azorín eran los elegidos para recibir con cariño una distinción propia de quienes ven esta fiesta de Don Carnal como un modo de vida.

En el escenario de la plaza de España, epicentro de los actos oficiales organizados por la delegación de Fiestas, era la propia delegada, Laura Almisas, la que explicaba los motivos que habían llevado en este caso a elegir a los protagonistas de un merecido homenaje. 

El AMPA de Azorín, desde 2006 participando de forma activa en la Gran Cabalgata del Humor, ha sabido inculcar en los alumnos de este colegio la tradición carnavalesca, y cada vez es un grupo más numeroso el que participa en el desfile con disfraces muy trabajados. Además, desde hace cuatro años son fieles a los pasacalles del sábado y domingo de Carnaval acompañando al pregonero adulto y al infantil, a las ninfas y atlantes, y con su presencia, ayudan a realzar esta fiesta. Es lo que decía Laura Almisas entregando una placa de reconocimiento a Paco Andrade, presidente del AMPA que por otro lado, lleva sangre carnavalera.

Al escenario de la plaza de España, lleno antes de comenzar el pregón de Carnaval de  Rosa Gatón, se subió una amplia representación de este colegio al que Paco Andrade quiso agradecer su implicación destacando que son las familias las que hacen posible que cada año, estén tan presentes en Carnaval. A título personal, como último año de presidente del AMPA, aseguró que siempre podrán contar con él, aprovechando la ocasión para acordarse de  su familia y amigos, en especial de sus padres, que  le enseñaron desde pequeño a querer el Carnaval como ellos enseñan ahora a las nuevas generaciones.

También Rafael Chacón subía al escenario a recoger de manos de la delegada de Fiestas, Laura Almisas, y del alcalde de Rota, Javier Ruiz, su placa conmemorativa. Agradecido y felicitando al AMPA Azorín por su trabajo, aseguraba que en su caso, el Carnaval le había dado más a él que él a esta fiesta que vive todo el año como una forma de entender la vida. El Carnaval mamarracho, el de la calle e incluso el borracho, es el que le gusta a este carnavalero que estuvo en la primera Peña Carnavalesca Roteña y fundó la de "La piñata" y "La media luna" además de participar en agrupaciones y romanceros, escribir algunas letras, presentar actos de Carnaval, haber sido pregonero en 1990 y lucir en muchas ocasiones disfraces que eran dignos de admirar.  Con su desparpajo habitual, agradeció el gesto del homenaje que quiso dedicar a su familia  y amigos, en especial a los que no están. Para él, Carnaval es sinónimo de libertad y por eso, lo practica más allá del mes de febrero.

Concluía así esta primera parte del acto oficial de inicio de esta fiesta al que siguió el XXXIII Pregón de Carnaval que pronunció Rosa Gatón rodeada de amigos y muchos chirigoteros.