Aprobar un Plan Especial de Protección del Casco Histórico (PEPCH) está siendo para el Ayuntamiento de Rota una de las tareas más difíciles, también caras, de sacar adelante.

Los planes presentados en 2008 y en 2011 no consiguieron la aprobación de la Junta de Andalucía, quien tiene que dar el visto bueno desde el punto de vista de varias consejerías al tratarse de un  casco histórico declarado BIC (Bien de Interés Cultural). Desde 2019, impulsado esta vez por el PSOE, se está  llevando a cabo este tercer intento de un documento del que la asociación "La Base Natural y Cultural (BNC) de Rota"  pide información al alcalde de la localidad.

Esta entidad, que lleva entre sus objetivos principales la defensa del patrimonio cultural, especialmente el conjunto histórico, ha presentado más de 200 alegaciones en colaboración con Ecologistas en Acción y la Asociación Nacional de Conservación al entender que el plan redactado no cumple el fin principal que debe tener, que es la conservación, y no la modernización como a su juicio, cree que prevalece en el planteamiento de este PEPCH aún pendiente de aprobación definitiva.

Aunque el PEPCH se ha sometido a exposición pública y se ha hecho llegar ya a la Junta de Andalucía para su aprobación, "La BNC de Rota" quiere saber en qué punto se encuentra exactamente el documento ya que hace cinco meses "que no se sabe nada", y por eso, acordaron en una reunión el pasado mes de enero, enviar esta solicitud formal al Ayuntamiento reclamando la información actual relacionada con el plan.  Sobre todo, apuntan, una vez que han escuchado al alcalde Javier Ruiz, decir en un medio provincial que este tercer intento de PEPCH no cuenta con muchas alegaciones y que se están incluyendo algunas modificaciones porque entiende que son ideas comprensibles.

"La BNC de Rota" quiere tener más información al respecto y por eso se han dirigido al alcalde y a la delegación de Cultura porque aseguran que las declaraciones de Javier Ruiz no son del todo ciertas ya que solo ellos como asociación en colaboración con otros colectivos, han presentado más de 200 alegaciones. Es más, añaden, la junta directiva de esta asociación en defensa del patrimonio recuerda que debido a la profundidad y calado de estas alegaciones, ellos solicitaron la anulación del plan que afecta al conjunto histórico por considerar que no cumple la función de conservación. "Un plan que no se basa en el mantenimiento sino que proyecta sustituir parte de los inmuebles por edificios nuevos; que propone construcciones modernas en espacios claves que deben ser respetados y no aporta una catalogación y protección del caserío roteño, no es un buen plan", afirma esta asociación que es habitual que salga en prensa denunciando situaciones que creen que atentan contra el patrimonio natural y cultural de Rota.