Los alumnos de los colegios Azorín y San José de Calasanz han celebrado esta mañana el Día de la Paz, enmarcado dentro del programa "Escuela, espacio de paz", que impulsa una serie de actividades para trabajar con el alumnado donde este sentimiento es el protagonista.

Como siempre, desde el colegio Azorín han celebrado la que ha sido ya su IV Marcha por la Paz, donde toda la comunidad educativa ha salido a la calle con pancartas donde se han podido leer frases de paz y amor mundial, trabajadas previamente en clases, adaptadas a cada edad y curso. La idea, al fin y al cabo, no es otra que transmitir valores de amor y respeto a los menores de modo que formen parte de su desarrollo personal.

Tras recorrer algunas calles desde el centro educativo hasta la plazoleta del Chorrillo, junto al pabellón "Manuel Villalba", los alumnos de Azorín han leído un manifiesto, también preparado en las aulas, y han cantado la canción "Quién dice que no duele" de Carlos Baute.

Este año, como novedad, a esta actividad, se han sumado los alumnos del colegio San José de Calasanz, que aunque en su centro también han llevado a cabo otras propuestas relacionadas con este Día de la Paz, han acabado la mañana uniéndose con los alumnos de Azorín. Aunque la idea era una foto conjunta en la playa de las dos comunidades educativas, algún problema de organización no ha permitido que se hiciera pero al menos, los escolares de una y otra parte se han podido ver y disfrutar de algunos minutos de esta salida fuera de la rutina.

Hay que señalar que esta es una actividad intercentro dentro del ámbito "Escuela, espacio de paz" y que los alumnos de los dos colegios llevan desde el curso pasado carteándose entre ellos reforzando así valores de amistad y recuperando aquella vieja tradición de escribir carta a los amigos.

De esta forma, Azorín y Calasanz han reforzado lazos en torno a un sentimiento tan importante como la paz.