Ha sido un verano negro en lo que se refiere a asesinatos de mujeres a manos de sus parejas.  Ha habido una muerte cada dos días y en esta misma semana se han contado hasta cuatro. Por eso, anoche, colectivos feministas de todo el país se sumaron a la convocatoria  "La noche será violeta", que partía desde un grupo de Alicante, para volver la noche violeta, color que se asocia a la memoria de las víctimas violencia de género y de lucha contra esta lacra social.

En Rota, a través de la Asociación de Mujeres Feministas Roteñas, esta cita también tuvo repercusión. Alrededor de 70 ciudadanos, hombres y mujeres, se concentraron en las puertas del Palacio Municipal Castillo de Luna con velas moradas y algunas camisetas del mismo color. Lo hacían tras un par de ponencias que se habían desarrollado horas antes bajo el título "Las máscaras de Eva" sobre el papel de la mujer en la historia y la mitología.

Fue una concentración de apenas media hora, donde se pudo ver a algunos representantes del gobierno local,  en la que se dio lectura a un manifiesto que venía a gritar aún más fuerte, la necesidad de parar más muertes. La unión contra los que matan, medidas más duras para los agresores, mejorar la situación de las mujeres víctimas de violencia de género y la necesidad de mayor implicación del Estado en acabar con este "terrorismo machista", fueron algunas de las ideas que ayer se lanzaron en una noche que tuvo visos violetas.

El gesto simbólico de anoche volvió a ser un grito contra la barbarie,  a favor de la libertad y el sentido común que se completó con la elaboración de un mural que se compuso de mariposas de papel de color violeta en las que los asistentes pudieron escribir frases  de ánimo y aliento a las víctimas, y rechazo a la violencia de género.