Desde el pasado 13 de abril hasta hoy martes 24, la Base Naval de Rota acoge un ejercicio militar que sería clave para conseguir el objetivo de convertirse en uno de los cinco cuarteles generales de nivel estratégico de la UE tras la salida de Reino Unido de la Unión Europea. La base militar roteña vendría a sustituir al actual cuartel general con sede en Northwood  y se sumaría a los ya existentes en París (Francia), Roma (Italia), Postdam (Alemania), y Larissa (Grecia).

En el día de ayer, la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, y una amplia representación de autoridades  y representantes militares de la UE y la OTAN,  vieron de primera mano el ejercicio militar Milex-18 con el que Rota quería demostrar que tiene capacidad para ser el nuevo Cuartel General Operacional de la Unión Europea desde el que se ejercería el mando de cualquier operación o misión de la Política Común de Seguridad y Defensa (PCSD), según explican desde el  Estado Mayor de la Defensa.

España lucha por que estas instalaciones roteñas acojan además, el centro de mando de la Operación Atalanta, de lucha contra la piratería en el océano Índico.  Si la Base Naval de Rota logra este objetivo, este conllevaría una inversión de 1,5 millones de euros por parte del Ministerio de Defensa para acometer obras de infraestructuras y adaptar la estructura de Mando y Control en Rota.  Pero España no es la única aspirante a ser Cuartel General Operacional de la UE tras el Brexit, también se presenta la candidatura de Italia aunque parece que con menos posibilidades por acoger ya el Cuartel General de la misión "Eunovformed". Hay que señalar que España se presenta de forma conjunta con Francia -que albergaría el centro de Seguridad Marítima para el Cuerno de África en la base francesa de Brest-.

La Base Naval de Rota hizo ayer una demostración de sus capacidades con el ejercicio militar de certificación -la resolución de un conflicto ficticio-, con el que trató de demostrar a la Unión Europea que está preparada para gestionar una crisis en el marco de la Política Común de Seguridad y Defensa (PCSD). La UE tiene la última palabra.