Antonio Franco
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¿SOBERANÍA?
Me pregunto si el Gobierno de España, nuestro Gobierno, tiene capacidad para defender los intereses laborales de nuestros compatriotas dentro de la Base Naval. A juzgar por la contestación epistolar recibida por parte de la Secretaría de Estado de España, parece que no está muy interesado en ello.
Todos los partidos políticos locales, con y sin representación en el Pleno Corporativo, enviamos una carta el mes de septiembre pasado pidiendo a nuestro Gobierno que elevara una queja formal ante el Gobierno de Estados Unidos para que la empresa LBAS (Louis Berger Aircraft Services, Inc) cesara en sus actuaciones de suplir a los trabajadores en huelga con militares norteamericanos y que intermediara, nuestro Gobierno, con dicha empresa para que se volviera al status quo existente en el momento de iniciarse las negociaciones entre los trabajadores y la empresa, readmitiendo a los trabajadores despedidos y anulando los expedientes sancionadores.
La contestación de nuestro Gobierno no podía ser más desesperanzadora. Nos indicaba textualmente: “le comunico que hemos remitido la misma (la carta) a la Consejería de Empleo, Empresas y Comercio de la Junta de Andalucía, por entender que es un asunto de su exclusiva competencia”. Semejante respuesta, en lenguaje coloquial, se denomina “echar balones fuera”. El Gobierno, nuestro Gobierno, ni siquiera se preocupaba (a juzgar por la respuesta) de la situación que estaba sufriendo trabajadores españoles dentro del recinto militar. ¿Puede un Gobierno, nuestro Gobierno, dejar desamparados a los trabajadores del aeropuerto militar de la Base Naval? Parece que la pérdida de Soberanía, nuestra Soberanía, interesa muy poco en este rincón de España.
¿No es capaz el Gobierno de España, nuestro Gobierno, ni siquiera de interesarse por esa llamada de solicitud de ayuda de una parte de la ciudadanía española?
¿Pertenece la Base Naval al territorio español? Como presumimos de que sí, me pregunto por qué no se cumple dentro del recinto militar las leyes laborales que rigen en nuestro “Soberano Estado”.
Como recordaba el portavoz del gobierno local días atrás, si las mismas circunstancias se diesen por parte de una empresa española en territorio estadounidense, el Gobierno de Estados Unidos hubiese tomado cartas en el asunto desde el primer momento.
En la misma misiva, solicitábamos al Secretario de Defensa, “debido a la complejidad del asunto”, una cita para que “los distintos portavoces políticos, junto con una representación de los trabajadores, pudiéramos explicarle en persona la situación con más detenimiento y pudiéramos resolver las dudas que se le pudiera plantear”.
La respuesta ya la he mencionado.
Desamparo ante la contestación recibida. Impotencia ante los servicios mínimos decretados como consecuencia de la huelga legalmente convocada. Impotencia ante la actitud de la Subdelegación del Gobierno de imponer un lugar para las concentraciones fuera de toda incomodidad, para no molestar.
Desamparo por parte de nuestro Gobierno. Impotencia por el comportamiento incapaz y nulo de nuestro Gobierno.
Salud.












Fútbol (fuga de empresas) | Viernes, 05 de Enero de 2018 a las 15:34:21 horas
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