El pasado pleno extraordinario aprobó entre otros puntos, la construcción de un parque acuático en una de las parcelas de Costa Ballena. Un planteamiento que desde la agrupación Sí se Puede Rota no se entiende por varias razones, motivo por el que se mostró en contra.

El concejal de este grupo municipal, Moisés Rodríguez, ya dejó clara su visión en la sesión plenaria argumentando que la decisión del gobierno local compuesto por PSOE e Izquierda Unida a su entender, traerá a a la larga más perjuicios para la localidad que ventajas en su desarrollo. Y es que si algo tiene claro Sí se Puede Rota es que en el modelo de una ciudad sostenible y respetuosa con el medio ambiente no tiene cabida un parque acuático que consume miles de litros de agua, por ejemplo. De hecho, tal y como ya planteó el concejal, para su grupo este tipo de infraestructuras tiene cortas miras de cara al futuro de la localidad ya que en principio, según el planteamiento del gobierno local, podrían generarse entre 15 y 20 puestos de trabajo en época estival, un número de empleos que para Rodríguez "no compensa en absoluto la huella ecológica y el consumo que generaría en energía y agua, ya que según diversos estudios, un parque acuático puede llegar a gastar una media  de 100.000 metros​ ​cúbicos​ ​de​ ​agua​ ​al​ ​año, consumidos​ ​especialmente​ ​durante​ ​su​ ​apertura​ ​en​ ​verano".

Moisés Rodríguez no entiende que se tomen este tipo de decisiones sólo unos meses después de la aprobación de la propuesta  "Rota 2020" que, financiada en gran parte con fondos europeos, apuesta por una estrategia de desarrollo urbano sostenible e integrado (EDUSI), con el objetivo de "convertir Rota en una ciudad que integre de forma global el urbanismo sostenible, la innovación y el ahorro y eficiencia energética". Así lo han manifestado en varias ocasiones los responsables municipales a los que Sí se Puede critica que por tanto, la construcción de un parque acuático en Costa Ballena no va en esa línea porque no genera economía de futuro ni fomenta la agricultura o la pesca como puntos "​que​ ​nos hacen​ ​diferentes".  

Dado que para la construcción de este futuro parque acuático haría falta la ocupación de suelo de dominio público de las parcelas E1 y V4 en Costa Ballena, el grupo municipal Sí se Puede no cree que el proyecto sea de interés público como se indica que debe recoger una decisión de estas características en el Reglamento de Bienes de las Entidades Locales de Andalucía. Para Moisés Rodríguez, la decisión de ocupación de suelo público "no queda justificada con una inversión de algo más de un millón de euros y la creación de 15 puestos de trabajo, ya que hay que tener en cuenta que esas parcelas estaban destinadas a servicios públicos como un destino escolar y zonas verdes o parques. Si el planteamiento es la cesión de estos terrenos por más de 30 años para un uso recreativo y aparcamientos, para el portavoz de Sí se Puede Rota "es más de lo mismo: turismo y empleo     poco sostenible, de baja calidad y precario, y que desarrolla un modelo totalmente agotado que​ ​no​ ​crea​ ​riqueza".

Por otro lado, Sí se Puede sostiene que justo ahora, cuando la población está más sensibilizada a nivel mundial, es el momento de iniciar un cambio de modelo implantando energías limpias, impulsando la agricultura ecológica y promoviendo la pesca sostenible donde Rota promueva ese cambio de modelo que la agrupación entiende que sería positivo también para el turismo ya que, "adoptando estas medidas, Rota podría convertirse en la ciudad del turismo sostenible por excelencia, lo que​ ​generaría​ ​muchos​ ​más​ ​de​ ​esos​ ​15​ ​empleos​ ​previstos​ ​en​ ​la​ ​infraestructura​ ​aprobada".