Las centrales sindicales de CCOO y UGT han mostrado su satisfacción porque en estos días, la Inspección Provincial de Trabajo se ha pronunciado en varias ocasiones a favor de los trabajadores del aeropuerto de la Base Naval de Rota contratados por la concesionaria Louis Berger Aircraft Services, Inc (LBAS).

Han sido varias las denuncias interpuestas por los dos sindicatos y el comité de empresa en cuestiones relacionadas con la aplicación del convenio colectivo aplicable a la plantilla. Entre los pronunciamientos de la Inspección de Trabajo  que CCOO ha destacado está el acta de infracción muy grave que se ha abierto a LBAS "por vulneración de derecho de huelga al realizar la empresa contrataciones de personal durante la convocatoria de esta". Huelgas que los trabajadores han protagonizado hasta en tres ocasiones en el último año solicitando a la empresa que volviera a la senda de la negociación del convenio colectivo que quedó rota hace ya un año, el pasado  6 de octubre de 2016, y que como consecuencia, trajo despidos en la plantilla, 12 a fecha del 31 de enero a los que posteriormente se le han sumado 4 más, en algunos casos por cuestiones disciplinarias, y dejar sin funciones a uno de los directores a cargo de operaciones aeroportuarias.

Dado que a día de hoy el conflicto sigue sin resolverse y se mantiene sobre la mesa la opción de reducción de plantilla por parte de Louis Berger Aircraft Services, Inc basándose la empresa en un estudio independiente que indica que en función del nuevo contrato firmado con la US Navy esta puede prestar servicio con una reducción de 45 empleados, CCOO ha pedido a la concesionaria que recapacite. 

Aunque la central sindical se muestra satisfecha por los pronunciamientos de la Inspección de Trabajo que ante sus denuncias y las del comité, dan la razón a los empleados,  CCOO hace un llamamiento para la LBAS "vuelva a la legalidad vigente y se abstenga de vulnerar las leyes españolas".

En este sentido, siguen pidiendo, como han hecho desde el principio, que la empresa readmita a los trabajadores despedidos ya que entienden que "nada lo justifica, es más, desde que se produjeron los mismos han aumentado los periodos de contrataciones, prolongación de jornadas y cambios de funciones". Es por ello que CCOO insiste en negociar el nuevo convenio colectivo y  hace un llamamiento a las autoridades españolas para que obliguen a la empresa a respetar las normas españolas. Además, solicitan que Louis Berger "deje de perseguir a los trabajadores", una cuestión esta última que ha llevado al comité de empresa a solicitar una nueva actuación de la Inspección de Trabajo en materia de Salud Laboral "por alto riesgo sobre la salud de los trabajadores". Concretamente se refieren a "riesgos psicosociales por la persecución a la que estos (los trabajadores) se ven sometidos en cuando a vigilancia extrema dentro y fuera de la Base por personal estadounidense y detectives privados", denuncia el sindicato.