Mañana, a partir de las 12.00 horas, en el Juzgado nº 3 de lo Social  de Jerez, comenzarán los juicios por los despidos de trabajadores del aeropuerto de la Base Naval  de Rota ejecutados el pasado 31 de enero por parte de la empresa Louis Berger Aircraft Services, Inc (LBAS), concesionaria de la Navy para la gestión aeroportuaria del recinto militar. 

Los trabajadores despedidos, un total de 12,  se verán apoyados por sus compañeros libre de servicio, así como por miembros de las centrales sindicales de CCOO y UGT.

CCOO agradece el apoyo de todos los grupos políticos y espera del Gobierno que interceda en este conflicto que comenzó el pasado mes de octubre, cuando la empresa puso sobre la mesa la decisión de despidos de la plantilla y cambios en los cuadrantes de trabajo.

Concretamente, mañana se celebrará el juicio de cuatro de los despedidos, y el resto hasta completar los doce, tendrán lugar entre septiembre y noviembre de 2017.

CCOO y la representación de los trabajadores confían en que las sentencias que recaigan sean positivas para estos cuatro primeros trabajadores defendidos por el gabinete jurídico de CCOO en Jerez. Según este sindicato, los despidos "son fruto de medidas más de represalias que económicas y organizativas, toda vez que las operaciones aeroportuarias han aumentado en los últimos años de tal manera que los directores y jefes de equipo deben realizar tareas de pista y pasaje que no le corresponden con su categoría".

Además, denuncian que la concesionaria Louis Berger Aircraft Services, Inc, asesorada por el bufete de abogados Garrigues, "ha pretendido en todo momento no cumplir la legislación española en materia laboral, negándose sistemáticamente a negociar el convenio colectivo en vigor y cambiando las condiciones laborales a los trabajadores, cuestión esta que llevaron a una anterior convocatoria de huelga, concentraciones de protesta en la puerta de la Base y una numerosa manifestación que contó con el respaldo mayoritario del pueblo de Rota".

De igual manera, recuerdan que existen más de once denuncias en la Inspección de Trabajo y doce demandas por sanciones injustas a trabajadoras. Queda pendiente judicialmente una demanda de los trabajadores por servicios mínimos abusivos y suplantación de huelguistas por parte de militares de los EEUU y por parte de directores de la empresa realizando tareas correspondientes a otros trabajadores en huelga, así como obligar al comité de huelga a realizar servicios mínimos.

Para CCOO, "los asesores de la empresa viven en el conflicto y se benefician económicamente de él, esto sumado a una falta de interlocución con la empresa ya que los miembros destinados a la mesa negociadora o cualquier diálogo propuesto por los trabajadores en el Sercla es rechazado por esta al no tener conocimiento de materia laboral y estar supeditada a la estrategia  del despacho de Garrigues". Por último, el sindicato confía en la justicia y espera sentencias positivas hacia los trabajadores ya que según denuncian, "los despidos forman parte de un chantaje para debilitar las reivindicaciones de la plantilla, siendo esta estratagema inútil, innecesaria e injusta".

Al margen de los juicios que comienzan mañana, los trabajadores irán a huelga a partir del 12 de julio hasta el 4 de agosto, los martes, miércoles, jueves y viernes.