En la tarde de ayer y con motivo del Día Internacional del Voluntario, el Ayuntamiento de Rota, a través de la delegación de Participación Ciudadana, volvió por segundo año consecutivo a destacar la labor de los voluntarios que trabajan de forma altruista en la localidad prestando parte de su tiempo libre en ayudar a los demás. Es una forma de reivindicar y visualizar esta entrega que a veces pasa desapercibida para el resto de la sociedad pero que desde el gobierno local se quiere tener muy en cuenta poniendo en valor el significado del voluntariado y la importancia de su papel para el desarrollo de la sociedad, en este caso roteña. Y es que como decía ayer el delegado de Participación Ciudadana, Antonio Franco, en el inicio del acto de homenajes, ser voluntario es ser una persona excepcional, entregada, comprometida y trabajadora y es necesario que esa predisposición quede manifiesta sobre todo, porque por ellos, Rota puede gozar y presumir de un amplio tejido asociativo que abarca entidades de muy diversa índole, desde ayuda mutua, deportivas, sociales, culturales, juveniles, de mujeres, etc.

Antonio Franco agradeció públicamente a los homenajeados el papel que juegan en el día a día de sus asociaciones, una labor reconocida por sus propios compañeros ya que en este día en el que se entregan los premios al voluntario, son las mismas entidades las que proponen a su candidato, en la mayoría de las veces, gente con la que trabajan día a día, por eso, para los elegidos, el premio es aún mayor, no sólo por el mero hecho de ser reconocidos sino porque este lo hagan con quienes comparte tareas.

Concepción Márquez Izquierdo de la Asociación Sáhara Libre,  Lucía Rodríguez Solaz de ALAT,  Juan Ramos Ramos de la "Cocina Solidaria",  Joaquín Zapata Montes de "Saber que se puede" y Alicia Cebrián Páez de Cáritas Interparroquial, fueron ayer los protagonistas en esta entrega de distinciones en la que participaron miembros de la Corporación municipal.

Nerviosos y agradecidos, todos los homenajeados mostraron su satisfacción por este gesto aunque en realidad, como buenos voluntarios y personas sin ánimo de ser reconocidas por lo que hacen, ninguno se sentía merecedor exclusivo del reconocimiento por lo que en todos los casos, lo compartieron e hicieron extensivo al resto de compañeros.

Concepción Márquez Izquierdo, que durante años ha acogido a un niño saharaui en su familia, fue definida por la presidenta de la Asociación Sáhara Libre como una persona comprometida, colaboradora y siempre dispuesta y por eso, la eligieron este año. Nerviosa, pero ilusionada, la homenajeada dio las gracias y aseguró que no hacía más que sus compañeros en una entidad centrada a ayudar a colectivos como el pueblo saharaui que tan mal lo pasa en los campos de refugiados.

Lucía Rodríguez, que no pudo estar presente por encontrarse fuera de la localidad por problemas familiares, fue la segunda homenajeada por sus 28 años en ALAT. Una asociación en la que empezó haciendo trámites administrativos y que ha pasado por muchos otros puestos dejándose siempre la piel en avanzar con nuevos proyectos. Fue Menchu Donaire, presidenta de la entidad, la que junto a Carmen Fuentes de la directiva, recogieron el premio en su nombre agradeciéndole tantos años implicada en ayudar a las familias de toxicómanos y a los propios afectados. Desde que naciera ALAT, han ido dando pasos, primero ayudando de forma directa a las familias, luego con talleres de reinserción para los toxicómanos, asistencias al centro penitenciario, proyectos de prevención para alerta a la ciudadanía, y un largo etcétera que ayer quedó patente. Lucía Rodríguez, decía su compañera, es de esas personas indispensables en la asociación para que esta haya ido creciendo pese a que todo ello ha implicado dejar tiempo dedicado a la familia para centrarse en la ayuda a los demás.

También Juan Ramos Ramos, que ya ha recibido algún otro reconocimiento desde el Ayuntamiento, fue el propuesto como el voluntario homenajeado por la "Cocina Solidaria". Desde que se jubiló, justo al día siguiente hace ahora algo más de tres años, siempre ha acudido a colaborar en este comedor social en el que se reparten y elaboran menús a familias desfavorecidas, sin faltar un solo día. Fue José Antonio Rodríguez "Peque" el encargado de presentarlo como una persona sencilla, contadora de historias que anima todas las mañanas la cocina desde donde se plantean los menús que personas sin recursos acuden a recoger. Su espíritu trabajador y alegre le han hecho merecedor de este homenaje.

En el caso de Joaquín Zapata Montes, el reconocimiento le venía tan grande que incluso decidió no acudir por vergüenza y dejó que fueran sus propias compañeras de "Saber que se puede" las que fueran en su representación.

Dispuesto en cada recogida de comida, acciones solidarias, repartos y cualquier cosa que haga falta de la asociación, esta entidad cuenta con Joaquín, una persona organizada, honesta, humilde, de gran corazón e implicada al cien por cien. En su nombre, recogió el premio Marisa Esquivel, ya que aunque él manifestó su intención de no acudir, la asociación entiende que sí era un buen merecedor del premio.

Por último, de Alicia Cebrián Páez, fue Vicente Beltrán de Cáritas Interparroquial el que puso sobre la mesa las actitudes que han llevado a que ella fuera este año la homenajeada. Alicia empezó en Cáritas de la parroquia de la O y posteriormente, pasó a la interparroquial. Se encarga de la parte más dura, decía Vicente, la de valorar a la familia que acude pidiendo ayuda para saber si es verdad o hay detrás algo de picaresca. En su caso, decía el compañero, ella prefiere equivocarse dándole a quien no lo merece, que dejar a alguien fuera que de verdad lo necesite, lo que explica su gran corazón y su implicación en una tarea que no es fácil.  Desde 2002 es voluntaria y su sensibilidad le ha valido para ser reconocida en el acto del día del voluntario. Alicia recogió su distinción destacando que lo hacía en nombre del resto de sus compañeros. 

Tras la entrega de premios, fue el alcalde de Rota, Javier Ruiz, el que dio por finalizado el acto felicitando a los homenajeados, congratulándose del amplio voluntariado con el que cuenta Rota y destacando la labor de las entidades que llegan donde la administración no puede. Para él como regidor, es todo un orgullo y por eso, entiende que este tipo de citas son importantes para que el resto de la sociedad visualice que hay personas anónimas que dan su tiempo y trabajo para ayudar a otras. Ese es el sentido de estos premios que espera que siga cumpliendo nuevas ediciones. Antes de terminar, mostró su compromiso de ayudar a las asociaciones que lo requieren y su intención de involucrarlas en proyectos de futuro para el mejor y más justo desarrollo de la sociedad roteña.