La Hermandad del Rocío llega esta noche a la aldea tras un camino muy diferente
El camino hacia la aldea almonteña que este año están haciendo los rocieros, en poco se parece al de ediciones anteriores en los que las paradas en el camino e incluso el calor eran las notas más comunes. Este año, la romería más multitudinaria para reencontrarse con la Blanca Paloma ha estado pasada por agua para todas las hermandades filiales lo que implica que la peregrinación haya sido bien distinta.
La Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Rota, que el pasado martes partía de la localidad ya con bastante lluvia, llegará esta tarde noche a la Casa Hermandad tras tres días de camino donde las paradas de convivencia han sido mínimas, casi nulas, debido a las lluvias y el estado de los terrenos. Y es que aunque los rocieros roteños no han tenido problemas a lo largo del camino, ya que no ha habido incidencias destacables según el hermano mayor, Francisco José Gómez "Suspiro", lo cierto es que el agua ha marcado el desarrollo de cada jornada hasta el punto que anoche, en vez de pernoctar en el Corral de Félix como habitualmente, tuvieron que avanzar algunos kilómetros más para llegar a Palacios donde en realidad deberían haber llegado este mediodía. El desvío que hoy cruzan hasta Matalascañas para ir por caminos más seguros y llegar a la aldea de El Rocío, lo que supone unos 25 ó 30 kilómetros más de recorrido, se ha decidido, coordinado con el servicio de emergencias 112, debido al estado del último tramo de ruta.
Anoche por tanto, en Palacios, a las hermandades filiales de San Fernando, Arcos, Chiclana, La Línea, Puerto Real y Chipiona que sí suelen pernoctar en este punto el miércoles noche, se han sumado este año Rota y Cádiz, que hoy juntas, tomaban el desvío que ha provocado la lluvia.
Aunque está claro que los rocieros roteños dormirán esta noche en la aldea, en la Casa Hermandad, el hermano mayor no sabía concretar a ciencia cierta a qué hora llegarían ya que todo depende de los caminos y de ese tramo nuevo que recorrerán. En esto días, poca convivencia y mucha agua han marcado las jornadas, ayer incluso no bajaron de los coches prácticamente y algunas misas se han tenido que suspender debido al estado del terreno o la copiosa lluvia que en ese momento caía.
Esta mañana, sobre las 13.15 horas, la Hermandad del Rocío de Rota salía de Palacios, celebraba la eucaristía y retomaba el camino en coche con algunos chaparrones a intervalos. Ya mañana viernes, será una jornada más relajada, para descansar y disfrutar del ambiente que el tiempo no ha permitido este año en el camino, y el sábado, será el día grande con la presentación ante la Hermandad Matriz en la ermita, sobre las seis de la tarde.
El agua podría remitir el fin de semana, según algunos partes meteorológicos, por lo que los rocieros todavía tienen jornadas por delante para conjugar devoción y fiesta.








































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