Las obras de la plaza Andalucía están a punto de concluir aunque ya se puede transitar por ella con normalidad desde el pasado miércoles. De aquellos detalles que todavía quedan por ultimar, se encuentra la adecuación del pozo datado de 1750 que se ha encontrado en esta plaza a raíz de las obras. Aunque el dato no es del todo exacto y la arqueóloga que se encontraba a pie de obra desde el principio no lo podía certificar al cien por cien, parece que hay una reseña histórica que habla de la existencia de un pozo de agua que abastecía a la Villa y que luego quedó seco tapándose en esos años.

El delegado de Urbanismo, Jesús Corrales, ha informado de que se ha optado  por mantener la estructura de este pozo "muy importante para la Villa en aquella época", y por ello, que quede visible a ras de suelo protegido por un cristal. Así, este pozo junto al que se colocará una placa explicativa y que contará con la iluminación adecuada, servirá también como un atractivo de esta plaza.

Con todo, el responsable municipal de Urbanismo señaló que gracias a este proyecto, la plaza ha cambiado por completo no sólo su fisonomía mostrando una plaza modernizada, diáfana, cómoda y equipada, sino también en todo lo que afecta al saneamiento.