ANÁLISIS POST ELECTORAL

Todo parece indicar que los resultados electorales del pasado domingo han dejado las puertas abiertas a que esta sea una legislatura corta, muy corta.

Los diferentes medios de comunicación, de todas la tendencias ideológicas, coinciden en señalar que el bipartidismo se ha roto. Casi ningún partido político está contento con los resultados. Digo casi, no todos.
El Partido Popular, pese a su triunfo, muy lejos de la mayoría absoluta, se va a ver imposibilitado a formar un gobierno estable. Esta vez, no podrá apoyarse en los partidos políticos de corte autonómico ( PNV o Convergencia de Cataluña). A pesar de la indignación de la calle, de las mareas multicolor que han recorrido toda la geografía, a pesar de los recortes, de los casos de corrupción destapados,… A pesar de todo ello, el PP ha vuelto a ser el partido más votado.

El PSOE ha cosechado el peor resultado electoral en la reciente Historia democrática de este país nuestro. Aún así, como decimos por aquí “se puede dar con un canto en los dientes”, se puede considerar satisfecho. Tras las última encuestas que apuntaban a un triple empate con PODEMOS y CIUDADANOS, el resultado final le ha alejado de los dos partidos emergentes.

Por su parte, CIUDADANOS, a pesar de sus cuarenta escaños en sus primeras elecciones generales, creo que no se siente satisfecho. Las encuestas les auguraban mayor porcentaje. Se equivocaron los que pronosticaban un “sorpresón” de Albert Rivera, al modo de Felipe González en 1982, salvando las diferencias ideológicas, históricas y personales. Me imagino que al periodista y tertuliano Eduardo Inda se le quedaría cara de bobo. La cara estupefacta que se le quedaría a este señor respondería, no sólo a los resultados de “su defendido” sino a los resultados de PODEMOS, partido político al que dirige todos sus ataques y con el que se debe indigestar su pan de cada día sólo con escuchar a algunos de sus miembros.

Sin duda, PODEMOS se debe sentir satisfecho del resultado obtenido. Ha contribuido a que el bipartidismo se haya roto, y ha presentado sus credenciales para el cambio político del país.

En cuanto a Izquierda Unida, a la agrupación política en la que milito, la decepción es la nota dominante. El casi millón de votos obtenidos sólo se ha traducido en dos escaños, como consecuencia de la Ley Electoral. Además, el ninguneo mediático al que hemos sido sometido durante toda la campaña electoral tampoco nos ha beneficiado.

En clave local, podemos decir que los resultados acaecidos en nuestra población son un calco de los producidos a nivel nacional. En Rota, el PP ha sido el partido más votado, aunque con una pérdida considerable de votos. El PSOE ha subido en número de votos con respecto a las elecciones del 2011, aunque sea poco, tal vez por haber alcanzado el gobierno local. Los votos perdidos por el PP se han marchado a PODEMOS y a CIUDADANOS. Izquierda Unida nos hemos mantenido dentro de los parámetros de otras elecciones generales.
Salud.