SINÓNIMOS Y ANTÓNIMOS

La mejor recompensa para un profesional es que te reconozcan tu labor, no sólo los compañeros, sino, y sobre todo, los demás. Si, aparte de tu labor, te reconocen tus valores como persona, entonces se puede decir que “has triunfado”, que tu paso por la vida va a quedar señalizado cual figura en una rotonda, en la mente de los que tuvieron la suerte de haber compartido contigo algunos años en la etapa de la vida. Uno de estos personajes es, sin duda, mi amigo y compañero, Manolo Vilela.

Decir que Manolo Vilela es maestro no es descubrir nada que no sepamos. La mejor recompensa que un maestro puede tener (ya lo mencioné hace algunos años cuando dediqué un artículo en este mismo medio a otro maestro)  es que sus discípulos lo recuerden con amor y cariño al cabo del tiempo. No es lo mismo ser maestro que ser funcionario de la enseñanza. Para mí hay una diferencia abismal. Es más, estos últimos preferirán ser denominados como profesores de educación Primaria. Prefiero la palabra maestro a la de profesor. No sé, será por su raíz etimológica.

Pero, Manolo Vilela es, además de maestro, una buena persona. Parece fácil dicho así. Uno puede evolucionar y convertirse en buena persona con el paso de los años. En otros, este calificativo es innato.  Es el caso de Manolo Vilela, que ya nació siendo una buena persona.

Nuestras vidas se cruzaron por mor de la Política y en torno al proyecto político de nuestra formación política. Habíamos sido compañeros desde siempre, pero, tengo que reconocer que no lo conocía. Me he enriquecido como persona a su lado en estos últimos ocho años. Manolo Vilela es todo bondad, hasta tal punto que no lo considero un “político al uso”. Me refiero a que le falta “ese punto de mala leche” ante ciertas situaciones. Y también tengo que reconocer que eso me exaspera en ocasiones.

Ustedes se preguntarán por qué he elegido este título (Sinónimos y Antónimos) para un artículo que está dedicado a la persona de Manolo Vilela. Los que lo conocen saben que Manolo es “el hombre de los sinónimos”. Él no se conforma con una definición concreta de un asunto concreto. No, él lo adorna con toda una serie de sinónimos que hace interminable, en ocasiones, la explicación por su parte.

Por eso, para definir sus cualidades como persona tengo que decir que Manolo es bondadoso, afable, tierno, compasivo, honrado, recto, sencillo, amable, condescendiente...

Para contraponer sus antónimos me estoy acordando de algunas personas que son intolerantes, severos, inflexibles...

En dos palabras, Manolo Vilela es “Buena Gente”.
Salud.